Las comunidades aceptan el reparto de 200 menores de Ceuta
A excepción de La Rioja, que argumenta que no tiene capacidad, todos los territorios responden a la petición del Ministerio de Derechos Sociales para aliviar la urgencia humanitaria. Madrid acepta, pero vota en contra
Las comunidades autónomas han acordado repartirse la acogida de 200 menores tutelados en Ceuta para aliviar la crisis humanitaria que se ha desencadenado tras la entrada irregular de unas 9.000 personas la pasada semana. Ante el enorme número de menores que sortearon los espigones ceutíes desde Marruecos y la limitada capacidad de la ciudad para acogerlos, el Ministerio de Derechos Sociales impulsó un acuerdo entre territorios para un reparto solidario de los niños que ya estaban en Ceuta. En la ciudad autónoma, sin embargo, aún quedan unos 800 niños y adolescentes identificados tras su entrada en los últimos días y un número indeterminado de chiquillos viviendo en la calle.
De las 16 comunidades convocadas para apoyar con plazas de acogida la emergencia humanitaria, solo La Rioja ha rechazado ofrecer las 17 plazas que le proponía el Ministerio. La Rioja ha mantenido en el Consejo Territorial de Servicios Sociales celebrado este martes que no tiene capacidad suficiente y se ha comprometido a acoger apenas cinco menores, según fuentes presentes en la reunión. La Comunidad Valenciana, que asumirá la llegada de 13 niños, se ha ofrecido a albergar a los 12 menores que le corresponderían a La Rioja hasta que tengan instalaciones suficientes.
La reunión ha discurrido en un clima amistoso hasta la votación. Ha sido entonces cuando Madrid ha elevado el tono y, aunque ha aceptado su cuota de reparto de 20 niños, ha sido la única comunidad en votar en contra. Madrid asume su parte, pero ha querido mostrar su desacuerdo, según participantes del consejo. Madrid ha criticado la política migratoria del Gobierno de Pedro Sánchez y ha apuntado el esfuerzo de la comunidad en la acogida de menores sin financiación extraordinaria. Madrid también ha cuestionado la capacidad del consejo para que este acuerdo de reparto sea vinculante.
La propuesta de reparto elaborada por el departamento de Ione Belarra ha tenido en cuenta, entre otros indicadores, la población de cada territorio, el número de menores que acogían, la renta per capita y la tasa de paro. Este modelo de reparto, conocido como Propuesta Share (compartir), es la que defiende el lehendakari vasco Iñigo Urkullu desde 2018 como la fórmula más justa para responder a los desafíos de acogida de la inmigración, en España, pero también en Europa.
La distribución solo se aplicará a menores de edad que ya estaban tutelados por la comunidad autónoma antes de la crisis con el objetivo de que el sistema de protección tenga más margen para afrontar la atención de centenares de nuevos niños y adolescentes hasta que se resuelva su destino. Muchos quieren volver y serán reagrupados con sus familias, pero otros tantos no quieren oír hablar de volver a Marruecos.
La Comunidad Valenciana, con el gesto de asumir parte de las plazas de La Rioja, será la que más niños y adolescentes acogerá, un total de 25. Madrid y Galicia asumirán 20 menores. Y les siguen Castilla y León (18), Cataluña (15), Castilla-La Mancha (14) y Andalucía (13). Canarias, Ceuta y Melilla, las comunidades con más tutelas de las que son capaces de asumir, han quedado fuera del reparto.
Las comunidades han llegado a la reunión con la garantía de que el Gobierno costearía la atención de los jóvenes. El pasado viernes el secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez, remitió un correo electrónico a los consejeros autonómicos en el que les informó de que, tras una reunión con el Ministerio de Hacienda, se dispondría de una financiación extraordinaria de cinco millones de euros para contribuir a la acogida de los menores de Ceuta. “Reitero nuestro agradecimiento por el esfuerzo que estáis haciendo con la acogida de estos menores”, cerraba la misiva.
La ministra Ione Belarra ha celebrado el acuerdo y espera que los traslados puedan realizarse “en el plazo más corto de tiempo” posible, aunque, ha dicho, dependerá de cada comunidad y sus posibilidades para desplegar las plazas. Bellarra ha afirmado también, sin concretar en qué información se basa, que de los al menos 800 menores entraron irregularmente la semana pasada y han sido identificados, aproximadamente 200 querrán quedarse en la ciudad.
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