Detenidos dos hombres por patronear una de las pateras naufragadas en cabo de Gata

El pasado domingo, 17 personas partieron desde la playa de El Merdeg, en Orán (Argelia) en una embarcación de fibra. Tenía cinco metros de eslora, dos de manga y un pequeño motor Yamaha de 85 caballos. No contaba con chalecos salvavidas ni iluminación, a pesar de que la mayoría de la travesía hasta su destino se haría de noche y una mar en mal estado. Tanto, que ya en la madrugada del lunes y a unas 15 millas (unos 28 kilómetros) de la costa andaluza, la barcaza naufragó. Hasta 16 personas fueron rescatadas más tarde por Salvamento Marítimo, pero una chica menor de edad falleció.

Este martes, dos personas fueron detenidas por la Policía Nacional por un delito de homicidio como presuntos responsables de organizar el viaje y ejercer de patrones del bote: uno de pilotarlo y otro se responsabilizaba del repostaje y el sistema de navegación. Mientras, Salvamento Marítimo y la Guardia Civil mantienen la búsqueda de hasta 17 desaparecidos en naufragios ocurridos frente a la costa almeriense desde el pasado 31 de diciembre. Fuentes policiales han explicado que están investigando quiénes manejaban esas pateras.

Ya por la tarde de este martes, Salvamento Marítimo ha iniciado una operación de búsqueda para intentar localizar una patera que se cree navegaba al sureste de Cabo de Gata, según ha informado a Europa Press fuentes del organismo.

La Policía Nacional cree que las dos personas arrestadas se asociaron, supuestamente, para llevar la embarcación que pretendía unir Argelia con Almería, un viaje cada vez más habitual en el Mediterráneo. En ella viajaban hasta 17 personas, organizadores incluidos, quienes, según la investigación, “pusieron en peligro” la vida de los pasajeros, que iban a bordo de una embarcación “totalmente inadecuada”.

Alrededor de las dos de la madrugada del lunes, frente a cabo de Gata, al este de la capital almeriense, la barcaza se hundió y una chica menor de edad falleció. Su cuerpo pudo ser recuperado e identificado como la hija de una de las integrantes de la embarcación. A esas horas otra patera naufragó en la misma zona, dejando otros dos cadáveres y una decena de desaparecidos. Los rescatados fueron trasladados al puerto de Almería, dónde recibieron la atención de personal de Cruz Roja. Tres de ellos fueron ingresados en el hospital de Torrecárdenas con síntomas de hipotermia.

Tanto un helicóptero de Salvamento Marítimo como dos de sus buques de rescate, Salvamar Spica y Salvamar Alginep, mantuvieron durante todo el lunes un operativo de búsqueda de los desaparecidos con el apoyo de las patrulleras de la Guardia Civil. El dispositivo se retiró al caer el sol, pero esta mañana, con el refuerzo del buque María Zambrano llegado desde Málaga, los medios de rescate han vuelto al mar para intentar localizar a las 17 personas desaparecidas. Salvamento Marítimo, además, ha lanzado un aviso a los buques que navegan por las cercanías de cabo de Gata para que “extremen la vigilancia” y puedan colaborar en la búsqueda.

Los dos detenidos como patrones de la embarcación naufragada han pasado a disposición judicial acusados de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros recogido en el artículo 318 bis del Código Penal y un delito de homicidio. Ambos se suman a los 36 que fueron detenidos por la Policía Nacional y fueron posteriormente enviados a prisión por los juzgados a lo largo de 2021.

Más de 500 personas en apenas dos semanas

Francisco Vicente, coordinador de Cruz Roja en Almería, ha explicado esta mañana que desde el pasado 23 de diciembre el equipo de trabajadores y voluntariado de la entidad ha atendido a 565 personas en 53 intervenciones desde el pasado 23 de diciembre, algo más de 300 solo en lo que va de año. “Jornadas intensas”, según Vicente, en las que participan entre 50 y 60 personas que atienden a los migrantes no solo con ayuda humanitaria y sanitaria, también psicológica, ya que muchos de ellos son familiares tanto de los fallecidos como de los desaparecidos.

Durante el año pasado hasta 6.519 personas alcanzaron la costa almeriense de manera irregular por vía marítima, de las que 254 eran menores, según los datos de la Policía Nacional. La mayoría proceden de Argelia, cuya costa está separada por unas 100 millas náuticas (unos 185 kilómetros) de la de Almería. Las embarcaciones suelen tener motores que rondan los 80 caballos y en ellas suelen viajar entre 10 y 18 personas —justo como las que naufragaron en la madrugada del lunes— quienes suelen pagar entre 3.000 y 5.000 euros por el viaje. “Nuestra prioridad es que los migrantes tengan un trato correcto y, a partir de ahí, siempre intentamos averiguar quiénes son los responsables de estas mafias”, aseguraron este pasado verano desde la Unidad de Extranjería de la Policía Nacional en Almería, dónde explicaron que la mayoría de personas suele seguir su viaje hacia Europa. “Muy pocas se quedan en España”, subrayaron.

De acuerdo con el informe Monitoreo del derecho a la vida publicado este lunes por la organización Caminando Fronteras, 4.404 personas han desaparecido en las rutas de acceso a España durante 2021, entre las que figuran 628 mujeres y 205 niños. Esta cifra duplica la del año anterior, en la que la suma ascendió a 2.170, y supone cinco veces más el conteo de 2019, 893. La mayoría de las muertes se produjeron en la ruta canaria.