El PP andaluz congela la tramitación de la ley de regadíos en Doñana hasta después del 28-M
La Junta no renuncia a aprobar la norma, pero la dejará dormir unas semanas. La iniciativa había provocado el rechazo del Gobierno central, la Comisión Europea y los expertos, que temen por el futuro del parque natural
No se moverá ni un papel en el Parlamento andaluz, hasta después de las elecciones municipales del 28-M, sobre la proposición de ley de PP y Vox que amplía los regadíos en el entorno del parque natural de Doñana. Esa es la firme intención que han trasladado este jueves fuentes del PP sobre la polémica iniciativa que encendió las luces rojas en Bruselas desde el mismo instante en que los grupos de la derecha la registraron en la Cámara andaluza el pasado 3 de marzo.
El PP quiere esperar a ver la cosecha electoral del debate. Pese a la posición en contra de la Unesco, la comunidad científica, la Comisión Europea, el Gobierno de España y los grupos ecologistas, los populares siguen adelante con su propuesta, aunque dispuestos a modificarla a través de una negociación, como ha reiterado hoy mismo el presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno Bonilla, en la sesión de control del Parlamento andaluz. “No podemos retirar nada hasta que haya una alternativa”, subrayó. En todo caso, la tramitación va a quedar hibernada por un tiempo.
La proposición de ley de PP y Vox pretende ampliar las zonas agrícolas regables en la comarca del Condado de Huelva, cuyos propietarios quedaron fuera de regulación cuando en 2014, vía decreto, se aprobó y consensuó el llamado plan de la fresa, el Plan Especial de Ordenación de Regadíos del Condado de Huelva que afecta a cinco municipios (Almonte, Bonares, Lucena del Puerto, Moguer y Rociana del Condado). La iniciativa no aclara a cuántas hectáreas afectará esa ampliación de regadíos, pero, en una carta remitida a la Comisión Europea en febrero de 2022, la Junta de Andalucía detallaba que estas ascenderían a 748,62. El PP dice que esos cultivos se regarán con aguas superficiales del trasvase de los ríos Tinto, Odiel y Piedras, no con agua del acuífero de Doñana. Pero los grupos ecologistas temen que acabe afectando al parque.
El Parlamento andaluz acordó la vía de urgencia para este proyecto, lo que reducía a la mitad los tiempos. El pasado día 2 acabó el plazo para solicitar comparecencias. Ahora la Mesa de la Comisión de Fomento tenía que aprobar el listado definitivo y establecer una fecha para esas comparecencias. Pero fuentes del PP sostienen que la mesa no será convocada antes del 28-M. De modo que habrá un paréntesis por las elecciones municipales. No obstante, el PP no renuncia a aprobar la ley antes de que termine el actual periodo de sesiones en julio, según insisten desde el Gobierno que preside Juan Manuel Moreno y el grupo parlamentario popular.
En todo caso, a las puertas de la campaña, tanto la Junta como el Gobierno central descartan abrir una negociación en este momento para modificar la proposición de ley. La ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, reclama la retirada de la ley para empezar a hablar; y Moreno exige “una alternativa” antes de dar marcha atrás. “Estamos dispuestos a hablar, a dialogar con todos”, ha insistido el presidente andaluz, remarcando que la proposición se puede cambiar durante la tramitación parlamentaria. Por ahora, los grupos de izquierda del Parlamento mantienen su decisión de no presentar enmiendas y dejar al PP solo en ese debate.
Al presidente de la Junta le aprieta también Vox, su aliado en la anterior legislatura y el causante último de que el PP registrara la proposición para ampliar regadíos en el entorno de Doñana. “Espero que no den marcha atrás, nosotros no lo vamos a dar”, advirtió el portavoz de Vox, Manuel Gavira, que acusó a Moreno de “ser cómplice de la asfixia verde a los agricultores”. Aunque Moreno reconoció hace 15 días el desgaste político que le ocasionaba la propuesta de ampliación de regadíos en el entorno del parque —”me estoy dejando jirones”, dijo—, el PP ha contraatacado con la sequía y la falta de ejecución de obras hídricas en Andalucía. “Pedro Sánchez es el enemigo de los agricultores, es el enemigo de los andaluces. Su lema es a Andalucía ni agua”, afirmó hoy el portavoz del PP, Toni Martín.
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