Lágrimas, “drogas” y un presunto abogado llamado Jesús de Nazaret: la disparatada red del exjuez Presencia comparece en la Audiencia

El esperpento que rodea a toda la trama conspiranoica del exjuez Fernando Presencia, expulsado de la carrera por prevaricador y encarcelado la pasada semana por encabezar una presunta “organización criminal” dedicada a la estafa con la presentación de denuncias falsas, ha escrito un nuevo capítulo. El enésimo. Uno de sus colaboradores, Álvaro Arteaga, ha comparecido en la Audiencia Nacional este martes y, ante el juez instructor Joaquín Gadea, no ha reconocido a su abogado de oficio y ha pedido que lo defienda “Jesús de Nazaret”. Según fuentes jurídicas, ante tal insólita petición, Gadea le ha respondido que los letrados deben estar colegiados para poder ejercer, a lo que Arteaga ha vuelto a contestar: “Jesús no, porque la Biblia es fuente de Derecho”.

Con el interrogatorio de este martes a Arteaga, el juez Gadea ha cerrado una ronda de dos semanas de declaraciones de los siete principales implicados en la trama. A cuatro de ellos los envió la pasada semana a prisión: al propio Presencia, que defendió que aún ostentaba la condición de magistrado y que esta le otorgaba “una inmunidad” mayor que la del “jefe del Estado”; a Alberto Royuela y Santiago Royuela, padre e hijo, dos históricos conspiranoicos que han acusado durante años sin pruebas a un grupo de fiscales y funcionarios de centenares de asesinatos; y a Juan Martínez Grasa, un colaborador de los Royuela.

A los tres restantes, tras interrogarlos este lunes y martes, Gadea les ha retirado el pasaporte, les ha prohibido salir del país y les obliga a comparecer semanalmente ante el juzgado. Además, el magistrado ha pedido a los forenses de la Audiencia Nacional que elaboren un informe sobre la salud mental de dos de ellos (Arteaga y Alejandro Diges), que se dedicaban a presentar las denuncias de la red de Presencia ante las diferentes “autoridades receptoras”, según el sumario. Arteaga ha hecho referencia este martes a que quería que “Jesús de Nazaret” le defendiera en la causa —en un artículo difundido en la web, un simpatizante de Presencia ya llegó a calificarlo como un “juez ungido por Dios” y definía a sus seguidores como “guerreros del Ejército de Dios” inmersos “en una guerra” contra “las legiones de Satanás”—.

Por su parte, cuando se preguntó a Alejandro Diges por su relación con Presencia, este arguyó este lunes ante el juez que “llegó a estar cuatro días secuestrado y drogado”.

La séptima investigada, Lidia Reina, ofreció una cara distinta. Según fuentes jurídicas, tras llegar en silla de ruedas el lunes a la Audiencia Nacional, le manifestó a Gadea que se arrepentía de todo y que pedía perdón. Tras echarse a llorar, insistió en que había sido engañada y que pensaba que estaba trabajando para un juez que luchaba contra la corrupción, en referencia a Presencia. Es más, según estas mismas fuentes, Reina mostró cierta predisposición a colaborar y dio explicaciones de cómo funcionaba Acodap, la asociación encabezada por el exmagistrado prevaricador. Ella se dedicaba a distribuir por internet y redes sociales las denuncias y actividad de la trama.

La investigación señala que Presencia urdió un presunto grupo criminal para ganar dinero mediante la presentación de denuncias falsas con pruebas fabricadas ad hoc contra altas instituciones del Estado y cargos públicos, a los que atribuían cuentas en paraísos fiscales, que publicitaban a través de internet y redes sociales. Los implicados recaudaban después dinero entre sus seguidores, que les hacían aportaciones monetarias al “creer estar” ayudando a “luchar contra la corrupción”. Según la Guardia Civil, la trama recaudó más de 185.000 euros en 2021 y 2022. Gadea destaca que Presencia utilizó más de 30.000 euros para gastos de “índole privada”. Otros imputados “recibieron” igualmente importantes sumas: entre otros, Alberto Royuela (27.200 euros); Lidia Reina (15.174); y Alejandro Diges (5.850).