Amazon abrirá en septiembre su centro logístico de Asturias

Hace cinco años que los ejecutivos de Amazon comenzaron los contactos a través de la Cámara de Comercio de Oviedo para sopesar la posibilidad de instalar un centro logístico en Asturias. La urbanización del Polígono de Bobes —en Siero—, fue la oportunidad para convencer a Amazon y el plan cuajó en una inversión de 300 millones de euros para instalar un centro Amazon Robotics Sortable (ARS). La sede cuenta con una superficie de más de 175.000 metros cuadrados y comenzará a operar la primera semana de septiembre con más de 400 puestos de trabajo directos, alcanzando las 1.500 personas empleadas en un plazo de tres años.

De esta manera la multinacional aplaca los temores que desde la finalización de las obras en 2022 se elevaron hasta el punto de que el Gobierno de Asturias llegó a pedir explicaciones sobre un retraso que tuvo su origen en la reorganización que Amazon tuvo que realizar tras una pandemia, una crisis inflacionista y una guerra, que hasta el momento ha causado el despido de 27.000 trabajadores en todo el mundo y la cancelación de otros centros similares al asturiano.

La puesta en marcha del primer centro Amazon Robotics Sortable (ARS) de Asturias, el sexto de este tipo en España y que se suma a la estación logística creada en 2019 por la multinacional en el Principado, fue anunciada esta semana en la sede del Gobierno de Asturias, en Oviedo, por el director de Relaciones Institucionales de la empresa para España y Portugal, Christoph Steck. “Asturias es un punto estratégico para nuestras operaciones”, aseguró el directivo, quien confirmó que “el centro se abrirá entero en la primera semana de septiembre y su uso logístico será progresivo”.

Una noticia recibida en Asturias y en el concejo de Siero —el tercero de Asturias con mayor concentración empresarial del Principado— como una especie de maná. “Nos hicisteis sufrir, pero bien”, ironizó el alcalde de Siero, el socialista Ángel García, quien manifestó su entusiasmo de forma muy gráfica: “Esto de Amazon se parece un poco al partido del Atlético de Madrid con el Inter (acabo agónicamente en los penaltis con victoria del equipo español). En estos últimos meses, hubo muchas dudas e incertidumbres, e incluso la gente que primero criticaba la plataforma ahora es acérrima defensora de su apertura. Siempre he sido optimista, cuando anunciaron la construcción del centro dije que era el día más feliz para mí siendo alcalde de Siero; pues hoy es el segundo día más feliz, pensando en esos 400 asturianos que van a empezar a trabajar ahí”, señaló el regidor.

Un proceso de cinco años

Tras los contactos abiertos en febrero de 2019 con el Gobierno asturiano en competencia con otros territorios del norte de España, la empresa firmó en junio de 2020 con la sociedad pública encargada de desarrollar suelo industrial en Asturias una carta de exclusividad sobre la parcela donde se implantaría y seis meses después un contrato de confidencialidad y otro de compraventa de esos 190.000 metros cuadrados.

Amazon, que inicialmente anunció que abriría el centro en otoño de 2022, pagó algo más por los terrenos del polígono industrial de Bobes 13,5 millones y abonó 4,3 millones más por la urbanización de la parcela adquirida, según el Gobierno asturiano, a precio de mercado —unos 100 euros por metros cuadrado— sin solicitar ninguna otra subvención, a la vez que consideró habitual la firma de acuerdos de confidencialidad.

El nuevo centro, con cuatro plantas, cuenta con un área robotizada de casi 40.000 metros cuadrados e incluye tecnologías como los robots paletizadoras, un robot en forma de brazo que agrupa palés y elimina la necesidad de levantar las cargas manualmente, o vehículos de guiado automático, que trasportan artículos de manera autónoma de modo que los empleados evitan tener que empujar y tirar de carros y contenedores. En las distintas plantas del edificio habrá robots autónomos que trasportarán pequeñas estanterías en las que los operarios colocarán los distintos paquetes. Las máquinas depositarán la carga en una cinta transportadora, con una superficie total de 14 kilómetros cuadrados, que a su vez trasladará los paquetes al muelle de carga, en la planta baja.

El responsable de la planta de Bobes será Carlos Ordeig, que lleva siete años desempeñando puestos de responsabilidad en Amazon y que previamente había trabajado en grandes superficies como Ikea o Amazon. “Estamos muy orgullosos de anunciar la inauguración de nuestro centro de Siero y así impulsar el talento y el empleo de la región. Gracias a este centro ofreceremos una amplia variedad de empleo de calidad y crearemos oportunidades laborales para todo tipo de personas, con más de 60 roles diferentes entre los que se incluyen puestos de finanzas, especialistas en tecnología de la información, personal de ingeniería y robótica, así como equipos que seleccionan, empaquetan y envían los pedidos de clientes. Además, las personas empleadas en puestos de entrada recibirán más de 1.700 euros al mes, con oportunidades para crecer y construir sus carreras profesionales con nosotros”, señaló Ordeig.

La compañía asegura que casi el 60% de los artículos vendidos en Amazon proviene de vendedores externos, que desde 2011 ha invertido más de 13.000 millones de euros en España —3.700 millones en 2022— y que, tras la apertura de varios centros el año pasado, en la actualidad cuenta con alrededor de 40 instalaciones que incluyen centros de operaciones y oficinas corporativas que dan empleo a 22.000 trabajadores.

Amazon, que comercializa productos de 200 pymes asturianas por 30 millones de euros al año, ya ha abierto el proceso de selección de personal.