_
_
_
_

Las tiendas ‘pop up’ llegan al centro de Barcelona

Una nueva fórmula de alquiler de locales, con contratos cortos, baratos y renovables mes a mes, se ensaya en algunas calles del distrito de Ciutat Vella

Blanca Cia
Turistas y algunos comercios cerrados en el centro de Barcelona.
Turistas y algunos comercios cerrados en el centro de Barcelona.MASSIMILIANO MINOCRI (EL PAÍS)

Anna Pérez mira la calle desde la puerta de la cansaladería Corominas que regenta y que abrió su abuelo en la calle de Regomir de Barcelona a mediados de los cincuenta del siglo pasado. No ve nada más que un mar de persianas cerradas. Esa cansaladería y el horno que hay al lado es la única actividad de una de las calles del Gótic sumidas en el silencio. La de ella es la tercera generación de charcuteros y reconoce que no sabe qué pasará: “ya quedaban muy pocos vecinos y menos desde que estalló la pandemia y en nuestro caso el turismo no es el cliente habitual”. Pero es que, además, los turistas que visitan este verano la ciudad no se adentran en calles desérticas.

No es la única, la vecina de Avinyó tiene el mismo panorama. Buena parte de Ciutat Vella y del Eixample más cercano a ella no levanta cabeza y según las entidades comerciales que las agrupan, como Barcelona Oberta, el índice de cierres sigue siendo alto, aproximadamente entre un 20% y un 30%. “Hay quien no ha podido aguantar la tormenta perfecta que ha comportado la pandemia; menos visitantes y cambio de hábitos del residente que teletrabaja en sus barrios y compra mucho más online”, comenta Núria Paricio, directora de esa entidad.

“Sí, hay mucho local que no reabre con otras actividades porque los precios no bajan, o solo se matizan, pero muy poco”, explica Isabel Rodríguez, gerente del eje comercial de Barna Centre que agrupa a un millar de establecimientos. Rodríguez se lamenta también de que la propiedad “clásica” de los locales ha cambiado: “Es que está deslocalizada, hay muchos fondos de inversión”, añade la gerente.

La desaparición de los vecinos y la escasa diversificación comercial se nota ahora con toda la crudeza por la caída del turismo. “De todas formas, depende de las calles porque en algunas sí que parece que se remontará”, añade y pone como ejemplo Portaferrisa, Canuda o Portal del Àngel donde se están abriendo o ultimando aperturas. Como una gran perfumería que abrirá en el local que durante décadas ocupó la óptica Cotet, junto a plaza de Catalunya. En Ferran—una de las vías más castigadas y donde el gris de las persianas es el color que manda— ha abierto recientemente un restaurante y una comercio de turrones.

Más información
Barcelona compra locales vacíos para reimpulsar el comercio
Negocios que se atreven a abrir en plena pandemia

Buena parte de los locales cerrados son propiedad de fondos de inversiones con una filosofía diferente del negocio. “Son los que no tienen prisa por abrir, esperan a que la ciudad se recupere, que vuelva el turismo para que su inversión sea rentable”, argumenta Àngela Sánchez, directora de Retaill de la inmobiliaria Laborde-Marcet, que tiene unos 200 locales en venta o alquiler en la zona centro. Es el otro tipo de propiedad, la de personas físicas o empresas, las que ensayan nuevas fórmulas para que los locales no estén cerrados, que por lo menos las persianas estén arriba. Una de ellas son las pop up, tiendas que se abren pero con un futuro más bien efímero. Alquilan los locales por seis meses y luego pueden renovar mes a mes con un precio muy por debajo —hasta un 75%— del que demandaba antes la propiedad. “Se trata de actividades que no requieren hacer obras en los locales, poco mobiliario, y que prueban sin tener que afrontar fuertes alquileres y los propietarios pueden cubrir gastos. Se ha hecho con varios locales en Pelai, Rambla de Catalunya o Portaferrisa”, concreta. Fórmulas que son pasajeras a la espera de que se recupere el mercado. Desde su punto de vista, los precios comerciales en el centro sí que han bajado: “Nosotros hemos alquilado ahora un local de 60 metros cuadrados por 6.000 euros al mes y antes estaba a 14.000”.

Demanda de “rehabitar” el ‘corazón’ de Barcelona

Mientras el turismo fue el maná, pocas voces alertaban sobre sus efectos colaterales: expulsión de los residentes y desaparición del comercio de proximidad. Ahora, Barcelona Oberta o Barna Centre, entre otras entidades, demandan a las administraciones un plan urgente para que el centro de la ciudad pueda ser vivible, con viviendas accesibles, actividad económica y puestos de trabajo. Iniciativas recientes del consistorio, como la compra de locales para ubicar otras actividades y comercio de proximidad, están bien valoradas aunque se consideran insuficientes. Frente a un cierre temporal o definitivo de un tercio de negocios en el centro; los comercios de los barrios han resistido mejor la pandemia y los cierres no van más allá de un 7%.

En la Illa, por ejemplo, donde el 80% del comprador es autóctono, de los 115 establecimientos que tiene, diez de ellos cerraron por el efecto de la crisis pero ocho se preparan para una nueva reapertura. “Estamos moderadamente contentos porque el nivel de compra también se está recuperando”, explica Aina Rubí, presidenta de los comerciantes de la Illa.

Carrera infantil adaptada en el Gòtic

La asociación de comerciantes de Barna Centre y la plataforma ciudadana Fem Gòtic han impulsado la primera Cursa Infantil Adaptada que se hace en Barcelona coincidiendo con las fiestas de Sant Roc, el 14 de agosto. La iniciativa fue promovida en un primer momento por Noemí Font, madre de una niña de seis años con espina bífida y que necesita un caminador para desplazarse, para evidenciar la falta de espacios para actividades deportivas de los pequeños con problemas de movilidad.

En ella podrán participar niños y niñas de cualquier parte de la ciudad pero con un máximo de 30 participantes y está pensada para poder utilizar caminadores, sillas de ruedas o férulas.

 

 




Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Blanca Cia
Redactora de la edición de EL PAÍS de Cataluña, en la que ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en diferentes secciones, entre ellas información judicial, local, cultural y política. Licenciada en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_