Miles de estudiantes de FP empezarán el curso tarde en Cataluña, otra vez

El proceso de preinscripción y matriculación de la Formación Profesional (FP) continúa siendo largo y arduo, a pesar de los diferentes cambios que ha sufrido en los últimos años. Con todo, en septiembre se repetirá uno de los fenómenos más controvertido: alumnos que empiezan el curso semanas más tarde del inicio de las clases porque se matriculan a finales de mes. Este año el Departamento de Educación ha querido simplificar los trámites, pero ello no ha evitado que el periodo de repesca y de asignación de las vacantes empiece tarde: el 12 de septiembre, justo cuando empieza el curso, de manera que estos alumnos no se podrán matricular hasta la última semana de septiembre.

Con la entrada en vigor del Real Decreto 659/2023 de ordenación de la FP, la Generalitat tuvo que rehacer el sistema de asignación de plazas creado tan solo dos años atrás y en el que los alumnos de ESO tenían prioridad a la hora de acceder a un grado medio. Este año, lo que ordena la prioridad de los alumnos es la nota del expediente, como pasa en la universidad. Y además se han establecido dos tandas: se realiza la adjudicación de plazas, según preferencias del alumnado, pero en la primera solo se matriculan (hasta el 18 de julio) aquellos que han logrado acceder a la primera opción. En una segunda tanda se revisan las vacantes para ver si se puede mejorar la adjudicación al resto de estudiantes (a veces se liberan plazas porque no todos los alumnos formalizan la matrícula). Pero estos no conocerán los estudios que se les ha asignado definitivamente hasta finales de julio y se matricularán la primera semana de septiembre.

Este año, Educación ha decidido dejar el periodo de repesca para septiembre, de modo que la lista de vacantes, tras el procedimiento ordinario, se conocerá el 12 de septiembre, justo el día en que se inicia el curso en FP. La lista con los estudios asignados se publicará el 25 y la matrícula se puede realizar durante la última semana de septiembre, de modo que estos alumnos se incorporarán a las clases dos o tres semanas más tarde que el resto de compañeros. Cataluña tiene un calendario tardío, ya que otras comunidades como Andalucía y Madrid tienen los plazos más comprimidos, de modo que resuelven todo el proceso ordinario en julio y la repesca a mediados de septiembre. El nuevo sistema supone también el acto público de adjudicación de vacantes, estrenado masivamente el año pasado y tan bien valorado por centros y familias, ya que era una forma instantánea y transparente de adjudicar las vacantes y realizar la matrícula.

“La idea del nuevo sistema es buena, porque al primar la nota es más justo, pero la aplicación es una chapuza”, valora el equipo directivo de un centro de FP de Barcelona. Desde este instituto listan una serie de problemas que se han encontrado, empezando por las fechas de matrícula. “El plazo para los alumnos finalizaba en el mismo momento que el nuestro para introducir los datos de los estudiantes en el sistema. Ha sido un espectáculo, al final nos han tenido que dar más tiempo porque era materialmente imposible”. Desde el centro también se quejan de que el nuevo sistema ha sido arduo para las familias: “Se publicaron las listas de todos los admitidos, pero solo dejaban matricular a los que tenían la plaza de la primera opción. Muchas familias no entendían que no podían matricular a sus hijos si estaban admitidos y que tenían que esperar una segunda lista. Se tenía que haber publicado solo el nombre de los que se podían matricular para no generar conflicto”.

El hecho de que la repesca sea a finales de septiembre también genera problemas. Por un lado, para los centros porque tardarán más a poder formar los grupos. “No puedes trabajar hasta tener los grupos hechos, y cuando empiece el curso todavía estarán a medias. Además, los tutores tardarán más en conocer los alumnos que tendrán, y en enviarles las comunicaciones…”, lamenta el equipo directivo de este centro de FP. Pero los más damnificados de ello serán los alumnos. “En 15 días es posible que en la FP superior ya hayan hecho un examen. Y en grado medio, los alumnos que se incorporan más tarde van más perdidos porque sus compañeros ya han creado vínculos y los nuevos se ven como un bolet”, añade el centro.

“El calendario genera un problema porque todas las familias quieren conocer si su hijo tiene plaza en julio. Los alumnos no pueden estar sufriendo hasta septiembre”, valora Jesús Martín, representante de la UGT en el Consejo Catalán de la FP. Para Martín, estos plazos tardíos lo que hace es beneficiar a los centros privados. “Los privados solo ofrecen los títulos más solicitados. “Si a un alumno le ofrecen plaza a 100 kilómetros, pero tienes un privado cerca de casa, la familia optará por el privado si lo puede pagar. También para no esperar hasta septiembre y asegurarse una plaza. El problema lo tenemos con los alumnos que no se lo pueden pagar”.

El pasado lunes, el Departamento de Educación daba a conocer los primeros resultados de la asignación de plazas, aunque ofreciendo datos parciales y descontextualizados. Educación ha optado por no facilitar cifras básicas como la oferta de plazas o el número de solicitudes recibidas hasta el mes de septiembre, cuando en años anteriores se conocían en julio.

Educación solo ha informado que en los ciclos de grado medio se han asignado 34.868 plazas, de las cuales el 71% (24.736) corresponden a la primera opción elegida por el estudiante, que son los que ya se han podido matricular. En la FP superior se han adjudicado 28.994 plazas, el 71% de las cuales (20.432) también han sido de la primera opción. En total, poco más de 45.000 estudiantes que se irán de vacaciones con la matrícula realizada. Aunque el departamento se niega a facilitar el número de solicitudes, las estadísticas de años anteriores sitúan el total de peticiones en unas 90.000, de manera que, si la cifra se mantiene, indicaría un bajo porcentaje de peticiones resueltas antes de que acabe julio.

En cuanto a las titulaciones que más solicitudes han recibido, en la FP media son las de auxiliar de enfermería, sistemas microinformáticos, gestión administrativa, guía en medio natural y electromecánica de vehículos. Y en la FP superior: administración y finanzas, educación infantil, integración social, márquetin y publicidad y laboratorio clínico.

Puedes seguir a EL PAÍS Catalunya en Facebook y X, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal