Guardiola pide más tiempo para negociar con Vox: “Es un partido constitucional con el que me quiero poner de acuerdo”

El culebrón político extremeño continúa su curso. La líder del PP en la comunidad, María Guardiola, ha pedido este martes a la presidenta del Parlamento autonómico, la socialista Blanca Martín, que le dé más tiempo para seguir negociando con Vox su investidura porque, a día de hoy, no cuenta con los apoyos necesarios. “Vox es un partido constitucional con el que me quiero poner de acuerdo”, ha dicho luego Guardiola a los periodistas. “Los extremeños deben estar en el centro de la negociación. Lo deseable es que el acuerdo llegue cuanto antes. Le he transmitido [a la presidenta de la Asamblea] que quiero ser candidata, pero que necesito tiempo para contar con los votos de Vox. Hay 15 días [hasta la sesión de investidura] y hoy hemos pedido que nos deje sentarnos y que le transmitiremos que llegaremos a un acuerdo”.

La presidenta de la Asamblea de Extremadura, Blanca Martín (PSOE), se ha citado en la sede del Parlamento autonómico, en Mérida, con todos los candidatos a presidir la Junta regional: los de Podemos, PSOE, PP y Vox. A lo largo de la mañana, Martín tiene previsto anunciar quién será el candidato o candidata que se someterá a la sesión de investidura antes del 20 de julio, como indica el estatuto. Los cuatro candidatos han pasado por el despacho de la presidenta. El de Vox, Ángel Pelayo Gordillo; la del PP, María Guardiola; la de Podemos, Irene de Miguel; y el presidente en funciones de la Junta y candidato del PSOE, Guillermo Fernández Vara. Al concluir esos encuentros, cada uno de los líderes regionales ha ofrecido una rueda de prensa. El PP y Vox suman 33 escaños, mayoría absoluta, pero Guardiola aún no ha podido amarrar el apoyo del partido ultra, y por eso pide más tiempo para seguir negociando.

Guardiola, que hace apenas una semana aseguró que en ningún caso integraría a Vox en su Gobierno porque “no se puede tragar con todo”, ha rebajado en los últimos días el tono, presionada por un sector del PP que considera un error esa estrategia. Preguntada este martes por si su postura sigue siendo la misma, la dirigente popular se ha limitado a contestar:

―La del PP es la misma. Es la posición de llegar a un acuerdo y de poner el interés de los extremeños por encima de cualquier cosa. Vamos a llegar hasta el último momento.

Guardiola, por tanto, no ha dejado claro si ahora está dispuesta a gobernar en coalición con Vox. “Lo que pido es que baje el ruido, porque será lo mejor para todos”, ha insistido.

El líder de Vox en Extremadura, Ángel Pelayo Gordillo, ha indicado a los medios, en una breve intervención de poco más de un minuto, que van a negociar “sin ningún tipo de límite”. A partir de ahí, ha dicho, Vox está dispuesto a escuchar “todas las propuestas” que se le hagan.

―¿Su máxima sigue siendo entrar en el Gobierno?

―Vamos a sentarnos con Guardiola. No vamos a decir nada más. —Ha dicho Gordillo.

―¿Cambiaría las consejerías por cargos intermedios?

―No puedo decir nada más. Eso es una cuestión que se debatirá en las conversaciones que tendremos.

¿Cuándo se harán esas reuniones? De momento, silencio. En esta tesitura, lo más probable es que, a lo largo de este martes, la presidenta de la Asamblea anuncie que el socialista Fernández Vara será el candidato a la investidura, porque es quien cuenta, a día de hoy, con más apoyos (PSOE y Podemos suman 32 escaños), aunque estos sean insuficientes para ser reelegido presidente. Fernández Vara, a la salida de la reunión con la presidenta, ha dicho que quiere presentarse a la investidura. “He trasladado la firme decisión mía y de mi grupo de que un mes después de que se produjeran las elecciones se inicie el reloj democrático y eso se llama investidura”.

Fernández Vara necesitaría no solo que Podemos votase a favor sino que el PP o Vox se abstuvieran. Si nadie resulta investido en esta primera sesión de investidura —en la que se requiere mayoría absoluta—, empezará a correr el plazo de dos meses para seguir intentándolo, ya con mayoría simple (más síes que noes). Y, en caso de que, pasados esos dos meses, ningún candidato haya logrado la confianza de la Cámara, esta será disuelta y se convocarán elecciones de nuevo, previsiblemente para noviembre.

Las negociaciones fallidas entre PP y Vox

Desde la noche electoral del 28-M, PP y Vox solo se han reunido dos veces para tratar de formar un Gobierno conservador en la región. El primer encuentro se produjo el 9 de junio. El segundo, el día 19. Ambas en una sala del parador de Mérida y ambas muy breves, según fuentes populares. El PP y Vox no alcanzaron ningún acuerdo. El partido ultra exigía entrar en el Gobierno con, al menos, dos consejerías, y Guardiola se negó, alegando que había comprometido su palabra durante la campaña electoral, en la que aseguró que no gobernaría con Vox.

El pasado martes, la tensión fue máxima en el Parlamento extremeño. Horas antes, como publicó EL PAÍS, el secretario general del PP en Extremadura escribió al líder de Vox dos mensajes de WhatsApp para tratar de desencallar las negociaciones. Los populares ofrecieron a Vox, además de la presidencia del Parlamento, una secretaría general en la Mesa y el senador autonómico que les corresponde. Vox se negó: insistía en entrar en el Gobierno. Tanto Vox como el PP decidieron entonces votar a sus propios candidatos para la presidencia de la Cámara, de forma que ese cargo relevantísimo acabó cayendo, contra todo pronóstico, en manos del PSOE.

El resultado electoral del 28-M

El PSOE fue la lista más votada en las elecciones regionales extremeñas del 28 de mayo, con el 39,89% de los votos. Sin embargo, el candidato socialista, Guillermo Fernández Vara, cosechó 28 escaños, seis menos que en las elecciones de 2019, cuando había alcanzado la mayoría absoluta. El PP de Guardiola, una de las grandes sorpresas de la noche electoral, logró el 38,87% de los votos y 28 parlamentarios, ocho más que en las elecciones anteriores y a solo un punto de los socialistas. Vox irrumpió por primera vez en la Asamblea autonómica, ocupando el tercer lugar, con cinco escaños y el 8,13%. Y Podemos quedó en cuarto lugar, con 36.379 papeletas y cuatro diputados. La mayoría absoluta en el Parlamento extremeño está en 33 escaños. El bloque de izquierdas tiene 32 diputados y el bloque conservador 33 (mayoría absoluta).

Extremadura ha sido desde siempre uno de los graneros de voto para los socialistas, que han gobernado la comunidad desde las primeras elecciones autonómicas de 1983, excepto en la legislatura 2011-2015, en la que lo hizo el popular José Antonio Monago.