La batalla municipal del 28-M: la derecha arrebata Valencia y Sevilla a la izquierda

El 28-M ha sido un éxito para el PP en las grandes ciudades. Los populares han conseguido la mayoría absoluta en la capital de España, Madrid, donde hasta ahora gobernaban con Ciudadanos y necesitaban el apoyo de Vox. Además, están en disposición de conseguir la alcaldía en Valencia y Sevilla, dos ciudades en las que hasta ahora mandaba la izquierda. Para ello tendrán que pactar con la ultraderecha.

Además, llegan buenas noticias para la formación liderada por Alberto Núñez Feijóo desde Zaragoza, donde el actual regidor popular se queda a un solo edil de la mayoría absoluta. La formación también ha ganado en Santiago de Compostela, aunque los partidos de izquierda suman mayoría. Por otro lado, Xavier Trias (Junts) ha logrado el primer puesto en Barcelona, pero si hay pacto del bloque de izquierda, puede quedar fuera de la alcaldía. Lo que es seguro es que no lo hará Ada Colau, que después de dos mandatos al frente de la capital catalana ha quedado en tercera posición, por detrás de los socialistas.

Madrid

Marea azul en Madrid. Del peor resultado de la historia en 2019, a la mayoría absoluta en 2023. José Luis Martínez-Almeida ha ganado las elecciones en la capital de España con 29 concejales y más de 716.000 votos. El alcalde de Madrid ha revalidado su mandato con un golpe de efecto: gobernará en solitario, sin ataduras, volviendo al PP de las cifras de 2011. El arco parlamentario del palacio de Cibeles quedaría así: el PP obtiene 29 concejales, 15 más que hace cuatro años; Más Madrid y su candidata, Rita Maestre, logra 12, siete menos que hace cuatro años; el PSOE, con la exministra Reyes Maroto, logra 11, tres más que en las anteriores municipales y Vox, que repite con el candidato Javier Ortega Smith, sumaría uno más que en 2019, con cinco.

Ciudadanos desaparece del mapa capitalino tras ocho años. De 11, a cero. Begoña Villacís ha sido arrasada por el PP. Ha perdido más de 270.000 votos con respecto a los comicios de hace cuatro años. Y Podemos, que se presentaba por primera vez a la capital con un candidato desconocido, Roberto Sotomayor, se ha quedado a las puertas de entrar, con un 4,9%, y unos pocos miles de votos de ese umbral del 5% que otorga automáticamente tres ediles.

Lea aquí la crónica completa, por Manuel Viejo.

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Barcelona

El triple empate en Barcelona que reflejaban las encuestas se ha convertido en una noche de infarto en la capital catalana, en la que Junts per Catalunya, con Xavier Trias al frente, ha conseguido encabezar el recuento. Lo ha hecho con 11 concejales, solo uno de ventaja, y sin que esté claro que consiga gobernar la ciudad. Lo que sí es seguro es que Ada Colau no podrá continuar al frente de la alcaldía, ya que ha quedado tercera, con nueve escaños, y tendrá que decidir si apoya al segundo clasificado, el socialista Jaume Collboni, que ha logrado diez concejales. Con ello, el partido de Colau podría mantenerse en el gobierno municipal, pero ya sin el trofeo de la alcaldía.

Trias ha logrado el 22,3% de los votos, frente al 19,8% de Jaume Collboni y al 19,7% de Ada Colau. Los 11, 10 y nueve concejales que han obtenido respectivamente marcan una clara diferencia respecto a los cinco que ha logrado Ernest Maragall, de Esquerra Republicana, los cuatro del PP y los dos de Vox, que ha entrado por primera vez en el Ayuntamiento de Barcelona.

La oleada de descontento con la gestión de los comunes que reflejaban las encuestas ha impulsado al candidato de Junts y también al socialista Jaume Collboni. El primero ha conseguido encabezar el recuento a base de una campaña que se ha centrado en explotar los déficits de gestión de la alcaldesa y en rechazar las políticas troncales de los últimos años en la capital catalana, especialmente en el ámbito urbanístico y de la reducción de tráfico rodado en el centro de la ciudad.

Lea aquí la crónica completa, por Miquel Noguer y Marc Rovira.

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Valencia

El PP ha ganado las elecciones municipales en Valencia y podrá gobernar con el apoyo de Vox. El bloque conservador obtiene un escaño más que la izquierda, que gobernaba la ciudad desde 2015.

La candidata del PP, María José Catalá, la más votada en la capital con el 35% de los sufragios, escala de los ocho ediles actuales a los 13. El partido de extrema derecha, que lidera Juan Manuel Badenas, dobla su representación, de dos a cuatro concejales, y junto al PP obtienen la mayoría absoluta para gobernar la ciudad. La derecha rentabiliza el hundimiento de Ciudadanos, que pierde de un plumazo los seis ediles que sacó hace cuatro años. El partido naranja, liderado por Fernando Giner, se queda fuera del Ayuntamiento, con un escuálido 2,26% de los votos.

En el bloque de la izquierda, que ha gobernado la ciudad desde 2015, Joan Ribó, de Compromís, pierde la alcaldía después de ocho años al frente y retrocede ligeramente —3,5 puntos menos que hace cuatro años—. Su partido forma parte de la candidatura Acord per Guanyar, con la que ha pasado de 10 a nueve ediles y es la segunda fuerza más votada en la ciudad. La socialista Sandra Gómez se queda igual que en 2019, con siete escaños, pero retrocede incluso unas décimas en porcentaje de voto. Y Unides Podem-Esquerra Unida, que se quedó sin representación municipal hace cuatro años, no remonta tampoco la barrera del 5%. La lista que encabeza Pilar Lima consigue solo un 2,34% de los sufragios.

Lea aquí la crónica completa, por Cristina Vázquez.

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Sevilla

El PP ha sido la fuerza más votada en Sevilla y podrá gobernar en solitario con 14 concejales, seis más de los ocho que obtuvo hace cuatro años y a dos de la mayoría absoluta. Los populares arrebatan así la alcaldía al PSOE, que pierde un edil —de 13 pasa a 12― y que ni siquiera con la suma de las coaliciones a su izquierda —que concurrían por separado― podría mantener el gobierno municipal, debido a su derrumbe: caen de cuatro a dos concejales. Vox se consolida como tercera fuerza en la capital, sumando un representante más a los dos que ya tenía y Ciudadanos, que partía con cuatro ediles, desaparece, igual que Adelante Sevilla, la formación de Teresa Rodríguez en la capital, que también se queda fuera del Ayuntamiento.

La pérdida de la capital andaluza supone un serio revés para el partido socialista. Lo es a nivel regional, porque esperaba que ese Ayuntamiento sirviera de dique de contención al efecto Moreno, que en las pasadas elecciones autonómicas del 19 de junio tiñó de azul una geografía andaluza acostumbrada al rojo. Además, la formación confiaba en que estos comicios fueran un punto de inflexión para recuperar la confianza del electorado. La pérdida del Ayuntamiento frente al PP también supone para el PSOE un revés a nivel nacional, por lo simbólico de la ciudad, la más poblada que gobernaba el partido.

Lea aquí la crónica completa, por Eva Saiz.

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Zaragoza

El Partido Popular ha arrasado en la capital aragonesa, donde prácticamente duplica concejales con respecto a 2019. Los 15 que ha obtenido lo dejan a solo uno de la mayoría absoluta. El PSOE pierde unos 5.000 votos, pero se queda con los mismos 10 concejales que en los anteriores comicios, y la otra formación de izquierdas, Zaragoza en Común, obtiene dos. Vox cosecha buenos resultados y pasa de dos concejales a cuatro. Con toda probabilidad, la próxima alcaldesa será la popular Natalia Chueca, de 46 años, que ha sido concejala de Movilidad y Servicios Públicos en el Ayuntamiento. El anterior candidato del PP y actual alcalde, Jorge Azcón, ha concurrido y va ganando las elecciones a la Cámara autónoma.

La gran perdedora ha sido la socialista Lola Ranera, concejala en el Consistorio desde 1999. Hace cuatro años, el popular Azcón se hizo con el bastón de mando tras alcanzar un acuerdo entre su partido y Vox —con el visto bueno de Ciudadanos— para cerrar el paso a las izquierdas. Así, Azcón contó con los votos a favor de sus ocho concejales, los seis de Ciudadanos y los dos de Vox, aunque hasta el último momento estos últimos habían amenazado con dejar la alcaldía en manos de la izquierda. El PP recuperaba de esta forma el Gobierno de la capital aragonesa tras 16 años de partidos de izquierda y a pesar de que la lista más votada fue entonces la de la socialista Pilar Alegría.

Por José Manuel Abad Liñán.

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Bilbao

La victoria del PNV en Bilbao deja un sabor amargo en este partido. Juan Mari Aburto volverá a repetir como alcalde, pero sufre un retroceso inesperado y se aleja de la mayoría absoluta a la que aspiraba en estos comicios. El PNV pierde dos escaños, pasa de 14 a 12, y estará obligado a pactar de nuevo con los socialistas para gobernar. En esta ciudad, EH Bildu ha dado un salto importante, siguiendo el impulso que ha recibido en estos comicios locales en el País Vasco. Los independentistas se sitúan como segunda fuerza política con seis ediles, dos más que en la actualidad, y relegan al tercer puesto a los socialistas.

EH Bildu se ha favorecido del desgaste del PNV. La candidatura liderada por María del Río en Bilbao ha captado muchos votos que antes iban a la primera fuerza política vasca y también se ha beneficiado de la pérdida de peso que está experimentando Elkarrekin Podemos. El mensaje moderado que ha trasladado durante toda la campaña la formación abertzale ha tenido su reflejo en las urnas con un apoyo superior incluso al que esta formación aspiraba a alcanzar.

Los socialistas de Nora Abete no han reunido un mal resultado, puesto que revalidan los cinco ediles que han tenido esta legislatura, pero se han visto sobrepasados por EH Bildu y quedarán como la tercera fuerza. El PSE-EE volverá a ser la llave de la gobernabilidad.

Lea aquí la crónica completa, por Mikel Ormazabal.

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Santiago de Compostela

El PP gana las elecciones en Santiago de Compostela, donde logra 11 concejales. Le sigue el BNG, con seis, los mismos que el PSOE. Compostela Aberta obtiene dos. Así, los populares desbancan a los socialistas como el partido más votado en la capital gallega. Sin embargo, este resultado no conducirá al PP al frente del Gobierno municipal.

Lo más probable es que el BNG, la segunda fuerza más votada, consiga la alcaldía si amarra el apoyo de socialistas y Compostela Aberta. Los nacionalistas gallegos y el PSOE han empatado a ediles, pero los primeros han conseguido casi 1.000 votos más. Los socialistas ya han anunciado que apoyarán un gobierno progresista.

El batacazo de la noche es el de los socialistas, que han pasado de gobernar y conseguir la primera posición en las elecciones de 2019 a la tercera plaza. Durante los últimos cuatro años, los socialistas han gobernado en solitario. El rostro de la derrota es el del alcalde Xosé Antonio Sánchez Bugallo, que ya ostentó el cargo entre 1999 y 2011.

Consulte aquí cómo avanza el escrutinio de las elecciones municipales en Santiago de Compostela.

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