Un intento de robo con una víctima inesperada: dos detenidos por la muerte de una vecina de Soto del Real

Iba a ser un robo, pero los dos asaltantes encontraron a alguien que no esperaban y reaccionaron de la manera más salvaje. Ese fue el final de Ana E. B. una mujer de 47 años que fue hallada en su vivienda de una urbanización del municipio madrileño de Soto del Real el 21 de mayo con terribles heridas que le causaron la muerte. Un hombre y una mujer fueron detenidos en julio por este homicidio, ambos españoles de 29 y 27 años respectivamente, aunque no ha sido hasta ahora cuando se ha levantado el secreto de las actuaciones. Los presuntos autores están relacionados con el hijo de Ana, con el que estaban en disputas presuntamente por temas de drogas. Esa noche, según la investigación, habían acudido a la casa para robar y saldar esas deudas, pero no esperaban encontrar a nadie en el interior.

En el dúplex vivía sola la víctima, pero hasta hacía solo unos años también había residido en ella su hijo. Por eso, la parte delantera del adosado estaba aislada de la trasera, después de una obra que hicieron para dividirlo en dos mitades y que cada uno residiera en una parte independiente de la otra. A una se entra por la puerta delantera y a otra, por un acceso trasero ubicado en un estrecho callejón de la urbanización. Esa entrada del callejón da a parar a una especie de patio en el que hay otra puerta para acceder a esa parte de la vivienda, en la que se encuentra la cocina. Es en la parte de atrás donde la mujer sorprendió a los asaltantes y donde el hijo de la mujer halló el cuerpo esa misma mañana a primera hora. Él y su padre la trasladaron al centro de salud del municipio, pero no se pudo hacer nada por salvarla.

Al principio todo parecía indicar que la mujer se había caído y se había dado un fuerte golpe en la cabeza que le había causado la muerte, pero al analizar las heridas, la autopsia reveló una herida por arma de fuego en la cabeza. Se trataba de una muerte violenta. Los investigadores de homicidios tomaron muestras de la vivienda y centraron sus pesquisas en el entorno del hijo de la mujer, que presuntamente tenía relaciones con el narcotráfico, explican fuentes de la Guardia Civil. Los agentes llegaron a la conclusión de que el móvil del crimen fueron las desavenencias entre el hijo de la víctima y un antiguo socio. Según la investigación, esa noche este exsocio acudió a la vivienda de la urbanización de Soto del Real junto a su pareja para robar al hombre drogas y dinero que pudiera almacenar en la casa en la que había residido y a la que seguía acudiendo con regularidad. “No esperaban encontrar a nadie”, apuntan fuentes del cuerpo. Pero la mujer que “les conocía de haberles visto con su hijo” les sorprendió y ellos dispararon. El sistema de seguridad del vecino de al lado, registró una subida de algunos decibelios.

La mujer, originaria de Colmenar Viejo, residía en esa vivienda unifamiliar desde hace algo menos de dos décadas, según apuntan algunas fuentes cercanas a la víctima. En ella vivió su exmarido, que se mudó a otra vivienda del municipio cuando se divorciaron, hace algo más de una década, señalan estas mismas fuentes. Entonces se quedó a vivir en esa casa con su hijo, que ahora es un veinteañero de nombre A., que hace unos tres años se había independizado, aunque seguía acudiendo con regularidad a casa de su madre, especialmente los fines de semana, aseguran algunos de los vecinos que le seguían viendo en la urbanización a menudo.

Después del crimen, los ahora detenidos huyeron y se instalaron en un pueblo de Cáceres, La Madroñera, pero los investigadores de la Guardia Civil los tenían localizados. Cuando reunieron suficientes pruebas, se trasladaron a Extremadura a detenerlos. En la casa en la que se habían estado ocultando los agentes encontraron un arma oculta en una chimenea. También se registraron otras viviendas en Soto del Real y en Alcobendas, donde los agentes hallaron un revólver y una escopeta. Además, los agentes encontraron útiles para forzar puertas, como extractor de bombines y llaves maestras, detectores de cámaras de vigilancia, armas blancas y bates. “Son elementos usados habitualmente en los vuelcos (robos) de droga”, especifica la Guardia Civil.

El juzgado de instrucción número 2 de Colmenar Viejo decretó el ingreso en prisión de ambos detenidos a finales de julio por este vuelco con resultado fatal.

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