Blair se reúne con el Papa en medio de los rumores de su conversión al catolicismo

El primer ministro británico, Tony Blair, acompañado por su esposa Cherie, ha llegado esta mañana al Vaticano, donde ha sido recibido en audiencia privada por el Papa Benedicto XVI. El encuentro, que ha durado unos 35 minutos, se produce mientras aumentan los rumores de que Blair, que dejará su cargo de primer ministro el próximo miércoles, está a punto de convertirse al catolicismo, la religión que profesa su esposa y sus hijos, tras años de reflexión.

Blair ha mantenido una entrevista a solas con Benedicto XVI guante unos 25 minutos y luego se les ha unido el cardenal Cormac Murphy-O'Connor, arzobispo de Westminster y jefe de la Iglesia católica de Inglaterra y País de Gales, lo que parece confirmar la intención de Blair de efectivamente abrazar la religión de su esposa y que la entrevista con el Papa tenía que ver con esta intención.

El coche que transportaba a los Blair se ha introducido en el recinto del Vaticano por la Puerta de las Campanas escoltado por cinco coches de carabinieri (policía italiana). La audiencia privada ha estado rodeada de una gran discreción tanto por parte de Downing Street como de la Santa Sede.

Aunque sea inminente, cosa que no ha confirmado Blair, su conversión al catolicismo no se producirá antes de que deje su cargo de primer ministro, con lo que se mantendrá vigente la circunstancia de que nunca ha habido un primer ministro británico católico. Blair profesa la religión anglicana, pero su esposa es católica y sus hijos han sido educados en el catolicismo. El primer ministro lleva años reflexionando sobre este paso, que según el mismo ha declarado al diario The Times, no está "completamente decidido".

No obstante, medios británicos conceden gran importancia a la entrevista, en la que, según un portavoz del primer ministro, Blair debe evocar ante el Pontífice "cómo lo ha hecho en el pasado", no solamente respecto a cuestiones religiosas, sino en otros temas de su mandato.

Si Blair confirma su conversión al catolicismo, no será necesario que sea bautizado de nuevo, ya que la mayor parte de las Iglesias cristianas reconocen la validez del bautismo recibido en el seno de otra Iglesia cristiana. Sí deberá hacer una "profesión de fe" para afrimar públicamente su "plena comunión" con los dogmas de la Iglesia católica.