El supuesto autor del apuñalamiento con tres muertos en Alemania se entrega a la policía
El fiscal general indica que el agresor, un solicitante de asilo sirio de 26 años, es sospechoso de pertenencia al Estado Islámico, grupo que se atribuyó el atentado
El presunto autor de los apuñalamientos en los que murieron tres personas y otras ocho resultaron heridas el pasado viernes por la noche en la ciudad de Solingen, en el oeste de Alemania, se entregó a última hora del sábado a la policía alemana, según confirmó el ministro del Interior del Estado de Renania del Norte-Westfalia, Herbert Reul, ya de madrugada. El sospechoso es el ciudadano sirio Issa al H., de 26 años, llegado en 2022 a este país y en el que residía con un permiso temporal como refugiado. Cuando se entregó llevaba la misma ropa con la que presuntamente cometió los asesinatos, sucia y manchada de sangre. Las autoridades no lo tenían registrado como extremista.
Unas horas antes de la detención, el Estado Islámico había asumido en su cuenta de Telegram la autoría del atentado “en venganza por los musulmanes en Palestina y en todas partes”. Un portavoz de la Fiscalía alemana, que se ha hecho cargo de la investigación, indició este domingo que el detenido es sospechoso de pertenencia a ese grupo terrorista. Su relación con esta organización se está investigando “a fondo”, añadió. El domingo por la tarde el hombre ingresó en prisión preventiva después de que un juez de instrucción del Tribunal Federal de Justicia de Karlsruhe dictara una orden de detención contra él. Se le acusa de pertenencia a organización terrorista y tres delitos de asesinato, entre otros.
Issa al H. iba a ser deportado el año pasado, según ha publicado el semanario Der Spiegel. El hombre llegó a Alemania en diciembre de 2022 y solicitó asilo en la delegación de Bielefeld de la Oficina Federal de Migración y Refugiados (BAMF). Como había entrado en territorio europeo por Bulgaria, las autoridades de Sofía eran responsables de él, según el sistema europeo de asilo. Berlín presentó una solicitud de acogida a Bulgaria, que aceptó.
Sin embargo, el intento de deportación fracasó en junio de 2023, según explica la revista. Las autoridades no pudieron encontrarlo en el centro para refugiados en el que estaba alojado. Se había fugado. Pese a ello, a finales de 2023 Alemania concedió al hombre, nacido en la ciudad siria de Deir al Sor, la protección subsidiaria que suelen recibir los refugiados del país en guerra civil.
Otras dos detenciones
Previamente, la policía alemana había detenido a otras dos personas, la segunda de ellas a última hora de la tarde del sábado, en un centro de acogida para refugiados de Solingen. El hombre arrestado tiene 36 años y se desconoce su relación con el presunto autor de los apuñalamientos. Por la mañana había sido detenido también un adolescente de 15 años acusado de saber que se iba a producir un atentado y no alertar de ello a las autoridades.
El ataque con cuchillo tuvo lugar hacia las 21.40 horas del viernes en una plaza céntrica de la ciudad de Solingen, en Renania del Norte-Westfalia. El municipio, de 165.000 habitantes, había congregado a miles de personas en la fiesta de la diversidad para conmemorar el 650 aniversario de su fundación. Había programados conciertos y otras actividades festivas durante todo el fin de semana. Mientras tocaba un grupo en directo en el escenario principal, un hombre empezó a atacar indiscriminadamente a los asistentes con un cuchillo apuntando al cuello. Asesinó a tres personas, dos hombres de 67 y 56 años y una mujer de 56. Otras ocho resultaron heridas, cinco de ellas de gravedad.
El agresor logró huir en medio de la confusión y el pánico que cundieron tras el ataque. La policía empezó a interrogar a los testigos y a los heridos y enseguida tuvo claro que se trataba de un único atacante. Se puso en marcha una operación a gran escala para tratar de localizarlo con ayuda de las fuerzas especiales y de varios helicópteros. Se cortaron las carreteras de acceso a Solingen y se instalaron controles por toda la ciudad, pero al final fue el propio sospechoso el que se dirigió a una patrulla de policía para entregarse a última hora del sábado. La policía ha encontrado un arma que podría haber sido utilizada en el crimen y la está analizando en busca de rastros de ADN.
Los habitantes de Solingen han empezado a dejar ramos de flores y velas en homenaje a las víctimas en el lugar del ataque, en el centro del municipio. “No permitiremos que nos dividan en momentos como este; permaneceremos unidos. No permitiremos que un atentado tan terrible divida a la sociedad”, aseguró la ministra del Interior, Nancy Faeser, el sábado por la tarde durante una visita a Solingen. El partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) trata de sacar rédito del atentado una semana antes de unas elecciones regionales en los Estados orientales de Turingia y Sajonia, donde tiene posibilidades de conseguir el primer puesto, según las encuestas.
Cuando todavía no se sabía nada sobre el origen del agresor, el líder de AfD en Turingia, Björn Höcke, calificado como extremista por los tribunales y condenado por usar eslóganes nazis, publicó en X un mensaje en el que preguntaba: “Ciudadanos de Turingia, alemanes, ¿de verdad queréis acostumbraros a esto? Liberaos, ¡acabad de una vez con la aberración del multiculturalismo forzado! ¡Proteged a vuestros hijos!”. Acto seguido pidió “votar cambio” y “enviar a los partidos responsables de esto al desierto”. Las juventudes de AfD han estado llamando en sus redes sociales a protestar contra la inmigración en Solingen.
Los apuñalamientos han vuelto a poner sobre la mesa el debate sobre la seguridad y la inmigración en Alemania. El líder de la oposición, el cristianodemócrata Friedrich Merz, ha criticado duramente al Gobierno de coalición de socialdemócratas, verdes y liberales por estar semanas debatiendo cómo prohibir portar cuchillos en público. El aumento de los ataques con arma blanca en los últimos meses había provocado que la ministra del Interior anunciara mano dura y la prohibición, entre otras cosas, de portar navajas de más de seis centímetros de hoja (actualmente el límite son 12).
El problema no son los cuchillos, “sino las personas que andan por ahí con ellos”, ha asegurado el líder de la oposición, según cita el Frankfurter Allgemeine. En la mayoría de los casos, se trata de refugiados, y la mayoría de los delitos obedecen a motivos islamistas, ha planteado Merz, que ha pedido no aceptar a más refugiados de Siria y Afganistán y empezar a deportar masivamente a los que ya están en Alemania y no tienen derecho a permanecer en el país.
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