Los principales partidos minimizan el gesto de ETA y piden que se disuelva ya

Nadie ha dado palmas ni ha irrumpido en salva de aplausos tras la actuación de los verificadores internacionales y la entrega de un pequeño arsenal de armas. PSOE, PP, en el País Vasco, y desde las direcciones nacionales, así como Izquierda Plural y UPyD piden a ETA que se disuelva y que no dilate más su desaparición, junto a la petición de perdón. En los discursos públicos se impone el cierto escepticismo en relación con este gesto, aunque se trata de un paso más y sí se constata que ETA está derrotada; sobre esto no hay dudas. Algunas de las fuerzas políticas, aunque no el Gobierno, han abogado por la unidad de las fuerzas políticas para dirigir el proceso del final del terrorismo de ETA; lo ha hecho abiertamente, por ejemplo, el PP vasco y el Grupo de la Izquierda Plural en el Congreso de los Diputados.

Lo ha pedido Arantza Quiroga, presidenta del PP en el País Vasco, quien apuesta por que el Gobierno de España y el Gobierno vasco, junto a los socialistas y los partidos democráticos lideren el fin de ETA para no dejar "esa baza a la izquierda abertzale”. Hoy no se ha centrado tanto en ese mensaje pero es el que transmitió hace tres semanas al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y en diversos encuentros informativos. También lo ha pedido Cayo Lara, coordinador general de IU. Los Gobiernos de Mariano Rajoy y de Íñigo Urkullu tienen que “acompañar” el camino hacia fin de ETA . “No vemos liderazgo en el Gobierno y lo debe haber”, ha pedido Lara en una línea similar a la presidenta del PP vasco.

Los principales partidos minimizan el gesto de ETA y piden que se disuelva ya

En cualquier caso, sobre lo ocurrido hoy no hay duda. Arantza Quiroga lo desdeña por insuficiente, al igual que Carlos Floriano, vicesecretario de Organización del PP. La líder de los populares vascos ha calificado de "tomadura de pelo" el anuncio de la Comisión de Verificación. "Asistimos al final de ETA, pero el anuncio de hoy no aporta nada que no sepamos", ha considerado, mientras Floriano ha abundado en el mensaje del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, al señalar que “la democracia española no necesita verificadores internacionales de nada” y que “los auténticos verificadores son todos los demócratas españoles y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado”. “Lo único que estamos esperando es que ETA se disuelva", ha insistido durante un acto en León.

Elena Valenciano, vicesecretaria general del PSOE y cabeza de lista del principal partido de la oposición para las elecciones europeas del 25 de mayo, ha calificado el anuncio de "pequeño gesto" y, en declaraciones a EL PAÍS, ha recordado que "lo importante es el gesto definitivo, que es desaparecer como organización". "La primera victoria fue que dejaran de matar; la segunda es que dejen de existir", ha razonado antes de agregar que confía en que su disolución sea "más pronto que tarde. Patxi López, secretario general del PSE ha enfatizado que "los socialistas nunca vamos a desdeñar los avances que se produzcan en esa dirección, aunque sean, como en este caso, bastante escasos. Pero, con la misma claridad, les digo que nunca nos vamos a conformar con menos que la desaparición de la organización terrorista, la asunción de responsabilidades por el daño injustamente causado durante tanto tiempo a la sociedad y la exigible reparación a sus víctimas".  López ha subrayado también que las formaciones política no pueden "caer, con atención desmedida, en un juego que, con golpes de efecto y escenificaciones periódicas". 

Ante el hecho del desarme parcial hay unanimidad en minimizarlo. “Las expectativas creadas por el comité de verificación no se han cumplido en absoluto; y ETA debería saber que no puede hacer una especie de entregas por fascículos”, ha dicho el coordinador general de IU, Cayo Lara. No le queda otro camino que “el desarme definitivo y su disolución, además de reconocer el daño causado a las víctimas”. Mucho han cambiado las cosas porque “ETA no es representativa de la sociedad vasca”, ha sentenciado el político izquierdista.

El discurso más crítico ha venido de UPyD que comparte con los demás el desdén por el hecho de esta entrega mínima de armas y resalta “el circo mediático y de representación teatral” que han protagonizado los verificadores internacionales. Pero también ha habido reproches “a la práctica totalidad de los partidos vascos y al Gobierno vasco” porque la acción de esos mediadores ha contado “con su connivencia”. Así lo ha expresado el líder de UPyD en el País Vasco, Gorka Maneiro. “Lo cual nos parece lamentable y de una gravedad extraordinaria”. El dirigente del partido magenta “exige al Gobierno de España que no caiga en las trampas de ETA y no permita ningún tipo de impunidad, ni medida de gracia para los presos de ETA, que es lo que la banda pretende y busca”.