Cris Lizarraga: “Me molesta mucho el término ‘micromachismo”
La cantante del grupo Belako aboga públicamente por la causa feminista y habla del nuevo disco de la banda que presentarán en Madrid el próximo 30 de agosto
Cris Lizarraga (Bilbao, 28 años) lleva cantando desde los 19 en Belako, una de esas bandas de rock que viven de la música gracias a la buenísima reputación de sus radicales directos. Con su propuesta eléctrica y oscura, se ha subido a escenarios de los festivales más importantes del mundo, y ha tocado en países como Rusia, Japón, Corea o México —donde les adoran—. Activista y punk, Lizarraga escribió en 2016 una carta contra el machismo de la prensa musical que generó mucho revuelo: desde entonces no ha dejado de abogar públicamente por la causa feminista. El 30 de agosto su banda presenta en Madrid Plastic Drama, “el mejor puto disco” de sus vidas en el “peor puto año” de sus vidas, dice. Mientras, ella se pregunta lo mismo que muchos otros músicos independientes en este momento: si en la nueva normalidad podrá seguir dedicándose a la música.
Pregunta. Su nuevo disco habla de problemas del primer mundo y del uso que hace su generación de las nuevas tecnologías. ¿Cuál es la red social más peligrosa?
Respuesta. Instagram. Si solo sabes de la gente a través de las fotos que ponen y los stories que suben, las relaciones se deterioran mucho. Es curioso, porque tú eres consciente de que lo que tú subes no es tu realidad, es una parte muy pequeña de tu vida. Y, sin embargo, das por bueno lo que ves a otras personas.
P. ¿Qué le empujó a escribir aquella carta contra el machismo?
R. Cuando empezamos a tocar Lore [bajista de la banda] y yo no entendíamos por qué a la gente le llamaba tanto la atención que fuésemos chicas. En las crónicas de los conciertos había todo tipo de apreciaciones sobre nosotras que no se hacían sobre [los otros miembros] Josu y Lander: que si íbamos más o menos guapas o feas, que si esta ropa o la otra. Estos últimos años las cosas han cambiado un poco, afortunadamente, pero nos pasaba de todo. Desde que nos trataban como a las acompañantes del grupo hasta un paternalismo tremendo.
Instagram es la red social más peligrosa, deteriora las relaciones
P. ¿Qué es lo más paternalista que le ha ocurrido?
R. Me pasa mucho que los técnicos me hacen mansplaining con el micrófono. Soy la cantante del grupo. ¡Sé perfectamente cómo funciona! Algunas cosas las pregunto solo por cortesía. Igual solo están intentando ayudar, pero es que siempre parece que no quieren que te estropees las uñas.
P. Eso es micromachismo…
R. Me molesta mucho ese término. Son actitudes machistas, por mucho que estén a una escala menor que la violencia explícita, las agresiones, las violaciones y los feminicidios. Lo de llamarle “micro” me parece terrible. Es como decir “gordita”.
P. Billie Eilish decidió que solo iba a ponerse ropa holgada para evitar comentarios sobre su físico.
R. En su día quería rechazar que hablasen sobre mi ropa porque me parecía sexista, pero al mismo tiempo me daba mucha rabia no poder expresarme porque la moda me encanta y refleja mis estados de ánimo. Ahora me da mucho menos miedo ponerme lo que me da la gana.
Al principio nos trataban como a las acompañantes de la banda
P. Ha contado que Alta fidelidad, de Nick Hornby, fue un libro muy importante para usted. ¿Por qué?
R. ¡Pero eso fue hace muchísimo! Si lo leyese ahora por primera vez me horrorizaría. Cuando eres adolescente alucinas con todos esos grupos que nombra. Pero cuando lo ves con perspectiva piensas: “¡Esto es horroroso!”. Es básicamente la historia de un tío que dice: “Todas mis ex están locas y yo soy un incomprendido”. Ahora mismo ya no me veo representada en narrativas tan binarias y tan heterosexuales, la verdad. A mí me ha costado mucho entender que soy bisexual.
P. Ha hecho un fanzine donde recoge testimonios de chicas menores de treinta años que han vivido maltrato psicológico por parte de sus parejas. ¿Por qué esas actitudes se perpetúan?
R. Los hombres de mi edad han crecido sabiendo que tienen que usar el lenguaje inclusivo, que deben decir ciertas cosas “feministas”. Con esos cambios superficiales tanto ellos como nosotras parece que podemos relajarnos. Por eso cuando te maltratan te sientes muy desconcertada. Tú estás predispuesta a una relación de igual a igual porque al fin y al cabo habéis hablado de política y feminismo un montón de veces y se supone que pensáis lo mismo. Y sin embargo la realidad es que nos han educado para que las relaciones sean desiguales y sigamos en dinámicas de sumisión.
P. ¿Se le ha caído algún ídolo masculino por machista?
R. Desgraciadamente, Bowie. Me enteré hace poco de que llevaba menores de edad a su camerino. Tengo tatuada la cara de Ziggy en un brazo y sigo admirando su carrera artística, pero ya no es dios para mí.
Nos han educado para que las relaciones sean desiguales y sigamos en dinámicas de sumisión
P. ¿Cuál fue su gran referente musical femenino de infancia?
R. Dover. Me encantaban. Para mí eran tan buenas, tan increíbles, que cuando me enteré de que eran hermanas, españolas y que la cantante se llamaba Cristina casi me da un patatús. Devil Came To Me es uno de mis discos favoritos.
P. ¿Y ha compartido con ellas experiencias sobre ser mujer en una banda de rock?
R. Sí. Amparo Llanos es muy activista. Dice que le gusta un montón que yo meta caña con este tema.
P. ¿Es posible separar entre obra y autor?
R. No en todos los casos.
P. ¿Por ejemplo?
R. En los casos que se dan en la actualidad. Que un creador de contenidos artísticos de ahora no se comporte como una persona decente no puede ser.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.