Los ‘mercados criminales’ escalan en América Latina

El crimen organizado ha incrementado su incidencia en América Latina, especialmente si se miran las actividades que les dejan réditos, como la trata de personas y el comercio de drogas sintéticas, según un informe elaborado por la Iniciativa Global contra el Crimen Organizado Transnacional (GI-TOC, por su sigla en inglés). Los “mercados criminales” incluyen muchas más actividades, como la extorsión, el robo de combustibles y la piratería, entre otros.

La organización sin fines de lucro elabora de manera bienal el Índice Global de Crimen Organizado en el que clasifica a 193 países en orden de mayor incidencia criminal y tres países latinoamericanos conforman el top10. Myanmar, Colombia, México, Paraguay, República Democrática del Congo, Nigeria, Sudáfrica, Irak, Afganistán, Líbano y Ecuador (empatado con Siria) son los primeros países en la lista, en ese orden.

Dentro del reporte, GI-TOC ofrece también un subíndice que analiza la fortaleza de los “mercados criminales” y en esa lista se encuentran México en el número uno, Colombia en el cinco, Brasil en el ocho y Ecuador en el 14. “Si se comparan las puntuaciones de los mercados criminales en las Américas desde el 2021 hasta el 2023, se observa un deterioro en todos los mercados”, dice el reporte de 248 páginas, publicado el 17 de enero. “Ecuador destaca por ser el país en el que más se han incrementado estas puntuaciones…otro país que ha experimentado un incremento notable es Chile”, advierten los especialistas.

“Junto con la expansión del mercado de la cocaína en las Américas, ha habido un aumento significativo del comercio de drogas sintéticas”, reza el texto. “América del Norte es la tercera región del mundo más afectada en este sentido. Dentro del continente, México parece el más afectado por este mercado”. En el 2022, el país destacó como un actor importante en el comercio de drogas sintéticas y presenció un aumento de la popularidad y la producción de ketamina, metanfetamina y fentanilo, escribieron los investigadores.

“Mientras que México pasó a ser, sin duda, el centro de atención, otros países de la región también experimentaron una subida de sus mercados de drogas sintéticas. El aumento del alucinógeno llamado «cocaína rosa» en Venezuela, Perú, Uruguay, Costa Rica y Panamá demuestra el aumento del uso y la distribución de las drogas sintéticas más allá de México”, dice el reporte.

En un lapso de apenas dos años, Ecuador ha sido testigo de un incremento significativo de los niveles de criminalidad. “Esto se debe, primero, a una falla muy fuerte de procuración de justicia e inversión pública en la política pública de seguridad, la política penitenciaria y la procuración de justicia”, explica Romain Le Coeur Grandmaison, especialista y uno de los autores del reporte. Ecuador dejó ir la estrategia de seguridad pública en los últimos años, asegura Le Coeur Grandmaison. “No sabemos exactamente hasta qué punto es corrupción activa, corrupción pasiva de desentendimiento público, falta de inversión, falta de seguimiento, falta de atención”.

La segunda causa es el nuevo papel “crucial” que juega Ecuador en el transporte de cocaína que sale de Colombia y Perú, apunta Le Coeur Grandmaison. “La droga llega hasta el puerto de Guayaquil, puerto que siempre tuvo una un papel muy fuerte en economías criminales, pero que en los últimos cinco años se volvió mayor. Lo que tienes ahí es la tormenta perfecta”, dijo en entrevista el especialista. La tasa de homicidios en Ecuador pasó de seis por cada 100.000 habitantes en 2019, a 25,6 en 2022.

En el caso de Chile, GI-TOC asegura en su reporte: “Si bien es posible que todavía no se pueda comparar la situación de Chile con la de México y la de Colombia, el país está mostrando analogías alarmantes en cuanto a las prácticas asociadas al crimen organizado. Por ejemplo, se han observado indicios de control territorial por pandillas criminales, al igual que otros fenómenos que hasta ahora no eran habituales en el país, como los ‘narcofunerales’”

A nivel mundial, el mercado de los delitos financieros es el más prevalente, con México y Guyana entre los 10 primeros países de todo el mundo. “En México, por ejemplo, los delitos financieros involucran a las instituciones del Estado y a entidades y a individuos del sector privado y los principales problemas son la apropiación indebida de fondos públicos, la evasión fiscal y la corrupción”, advierte GI-TOC.

“Las redes criminales de las Américas desempeñan un papel fundamental en la escena mundial y Colombia, México y Perú figuran entre los cinco primeros países para este indicador”, dice el reporte. Colombia ocupó el primer puesto mundial para las redes criminales y los grupos de tipo. Venezuela quedó a la par de Colombia en el indicador de grupos de tipo mafioso, seguida de cerca por México, Honduras, Haití y El Salvador.

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