El Atlético se encalla sin Falcao
El Mallorca iguala en el último momento y deja a los de Simeone a 11 puntos del Barcelona
Una versión reducida del Atlético, devaluado en todas sus líneas por las bajas de Falcao, Arda Turan, Miranda y Emre, no pudo mantener el pulso a los dos grandes de la Liga. Anulados por un Mallorca ultradefensivo, los de Simeone pierden comba respecto al Barça, que les aventaja ya en 11 puntos.
Pareció que la incidencia de las bajas iba a ser mínima en un encuentro que el Atlético comenzó dominando de forma apabullante. No hubo sorpresas en el planteamiento local, con un Mallorca encerrado a cal y canto, mientras que los laterales del Atlético, Juanfran y Filipe Luis, merodeaban la mayor parte del tiempo por el campo contrario. El Cata Díaz cumplía sin exigencias en el centro de la defensa y Tiago se bastaba para mandar en el juego. Pero pasaron los minutos y el equipo colchonero no lograba transformar su dominio en ocasiones, más allá de un temprano saque de esquina directo de Koke y de un disparo aislado de Diego Costa.
MALLORCA, 1 ATLÉTICO, 1
Mallorca: Aouate; Nsue (Álvaro, min. 79), Nunes, Geromel, Bigas; Pina, Javi Márquez; Arizmendi (Ximo, min.74), Pereira (Kevin, min.63), Giovani y Hemed. No utilizados: Calatayud, Fontàs, Martí, Alfaro.
Atlético: Courtois; Juanfran, Cata Díaz, Godín, Filipe Luis; Tiago, Gabi; Raúl García, Adrián (Cristian Rodríguez, min.64), Koke y Diego Costa. No utilizados: Asenjo, Cisma, Pulido, Mario Suárez, Saúl, Pedro Martín.
Goles: 0-1. M. 71. Raúl García. 1-1. M. 87. Kevin, con la zurda desde el área pequeña.
Árbitro: Mateu Lahoz. Amonestó a Raúl García, Tiago, Nunes y Diego Costa.
Iberostar Estadi: 10.738 espectadores. Se guardó un minuto de silencio por la muerte de Miquel Garro, fundador y presidente de la Federació de Penyes Mallorquinistes.
El Mallorca aguantó y esperó. Decenas de metros por delante de sus compañeros, Hemed y Giovani Dos Santos se las veían y se las deseaban para pescar algún balón. El mexicano le echó ganas y se hartó de correr tras la pelota, pero rara vez se asomó al área con posibilidades de desbordar. La ausencia de Víctor en punta restó aún más recursos atacantes al conjunto balear.
El Mallorca se pasó tres meses sin ganar, cayendo en picado en la clasificación, hasta que se reencontró con la victoria justo antes de las vacaciones (1-2 frente el Betis). Pero parece que esa leve mejoría fue flor de un día.
En la segunda mitad el Atlético se volcó por la banda izquierda, agitada por las incursiones de Filipe Luis. Por allí llegó la mejor oportunidad de los rojiblancos: un remate de cabeza que Raúl García estrelló en el larguero. A los de Simeone les faltaba capacidad para crear huecos y contundencia en la finalización de las combinaciones, dos cualidades que en el Atlético llevan el nombre propio de Radamel Falcao. El gol cayó finalmente como fruto de la insistencia, en una jugada que dejó mareada a la defensa local. Diego Costa se deshizo de Javi Márquez con un doble regate en el área pequeña y su disparo lo rechazó Aouate directamente a las piernas de Raúl García, que embocó de primeras. Se antojaba como un justo castigo a la pobre apuesta del Mallorca, un equipo al que la portería rival le quedó siempre lejos. Tanto que las carreras de sus jugadores languidecían a mitad de camino. Pero la fortuna se alió con los de Caparrós a tres minutos del final: la zaga atlética no acertó a repeler una jugada embarullada tras una falta colgada al área, y fue Kevin, un defensa que había entrado de refresco, quien batió a Courtois.
El Mallorca, que no gana en Son Moix desde que se impuso al Valencia el pasado 23 de septiembre, a punto estuvo de lograrlo de nuevo en el descuento, cuando Giovani envió una falta directa al palo. Habría sido un guiño demasiado generoso de la fortuna.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.