El Gobierno vasco rechaza la rotura de la urna en la elección del alcalde de Irún

De "acto inaceptable y absolutamente antidemocrático" calificó ayer el portavoz del Gobierno vasco el incidente de la destrucción por algunos de los asistentes al pleno del Ayuntamiento de Irún, celebrado el lunes, de una urna electoral. Por su parte, el vicepresidente del consejo regional del PNV en Guipúzcoa, Gerardo Bujanda, que dijo que no comparte la actitud adoptada por los concejales de su partido que abandonaron el pleno en que sería elegido alcalde el candidato socialista, ha convocado a dichos corporativos con el fin de "poder escuchar de su boca la explicación de algo que, en principio, consideramos inexplicable".Pedro Miguel Etxenike, consejero de Educación y Cultura del Gobierno vasco, y portavoz del mismo, evitó referirse a la actitud de los concejales del PNV, y se limitó a condenar duramente la acción de la persona que se apoderó de la urna y la lanzó al aire, añadiendo únicamente que "de todas formas, nada hubiera ocurrido a no ser por la actitud de los socialistas que fueron quienes el 23 de mayo propusieron que la votación fuera de viva voz y que sólo después de perder aquélla recordaron que la ley exige votación secreta, e impugnaron la elección".

Los concejales del PNV en ningún momento. consultaron a la dirección provincial del partido sobre la postura a adoptar en el Pleno. El vicepresidente del consejo provincial, Gerardo Bujanda, no dio importancia a esa ausencia de consulta "porque entre los concejales figuraba gente con experiencia política, como el anterior alcalde, y un diputado foral, y esperaba de ellos un comportamiento ecuánime".

De haber sido consultados, Bujanda hubiera desaconsejado el gesto de ausentarse del pleno, porque "siempre he sido partidario de que cada cual aguante el viento del destino con las velas que posee. Si hay que recurrir contra la sentencia, se recurre, pero no se marcha uno por las buenas".

En opinión de Bujanda, "cuando alguien decide irse de un sitio, tiene que contar previamente con una alternativa, porque si no, es caer en el mero gesto negativo".

Por ello, "hemos convocado a esos concejales para que nos expliquen una actitud que, en mi opinión personal, va contra las pautas democráticas de nuestro partido. Si hay algún motivo que desconozco, estoy dispuesto a rectificar mi opinión, pero mientras tanto no puedo dejar de lamentar profundamente lo ocurrido".

Por otra parte, la oficina de prensa del PNV indicó ayer a este periódico, en relación con la información, publicada en la edición de ayer, según la cual no había sido posible recabar la opinión del partido sobre los incidentes de Irún, que en la oficina de prensa no se recibió ninguna comunicación al respecto.