Muere un carabinero en atentado terrorista en Chile

Un oficial de la policía chilena especializada en la lucha contraterrorista resultó muerto y otros dos gravemente heridos por la explosión de tres bombas en una vivienda en la barriada de La Cisterna, al sur de Santiago, durante la noche de¡ martes (madrugada de ayer en España). El comandante Julio Benimellis, jefe del Grupo de Operaciones Especiales (Gope) de carabineros, murió de forma instantánea. Los tenientes Alejandro Pavez y Danilo Rojas fueron alcanzados por las explosiones cuando entraban en la casa.El atentado, reivindicado por el Movimiento de la Izquierda Revolucionaria, fue una trampa mortal. Una pareja que alquilaba la vivienda avisé al propietario que la abandonaban porque estaban bajo sospecha de la policía y que habían dejado explosivos preparados para detonar. El sector fue rodeado por fuerzas de carabineros, que esperaron la llegada del Gope. Después de la explosión, que derrumbó gran parte de la vivienda, la policía detuvo a cerca de 20 personas en las cercanías.

Tanto el Gobierno como partidos opositores de centro repudiaron inmediatamente el acto terrorista. El presidente democristiano, Patricio Alywin, dijo que los atentados permiten más represión, y el ministro del Interior, Sergio Fernández, pidió colaboración a la población para combatir el terrorismo. Ningún grupo se había atribuido ayer el atentado. La semana pasada, el Frente Patriótico Manuel Rodríguez desmintió estar detrás de la explosión de una bomba en una oficina de jubilados de las fuerzas armadas en Valparaíso, que costó la vida a una persona y dejó 20 heridos, pero sí admitió la autoría de un atentado en que fue quemada una decena de autos del municipio de esa ciudad.

Por otra parte, la justicia militar detuvo ayer al director de la revista Hoy, Abraham Santibáñez; al periodista Alejandro GuiWer, y a uno de los coordinadores de la campaña por el no en el plebiscito, el democristiano Genaro Arriagada, por presuntas ofensas a las fuerzas armadas en artículos y opiniones publicados en el semanario opositor. Los tres detenidos, a los que la justicia militar considera un "peligro para la sociedad", fueron trasladados a la cárcel de Santiago.