Marks & Spencer abre en la plaza de Catalunya el día 23

El nuevo centro de Marks & Spencer, situado en la esquina de La Rambla con la plaza de Catalunya de Barcelona, en el edificio que fue sede del Banco Central, abrirá sus puertas el 23 de noviembre. La firma ha realizado una inversión de 5.000 millones de pesetas en el establecimiento, que ha sido rehabilitado y reformado íntegramente manteniendo la fachada. En el interior también se han conservado las columnas y la galería del antiguo patio de operaciones del banco. El nuevo centro es el mayor de los nueve que tiene la cadena en España (en Europa hay actualmente 36 establecimientos de esta firma británica). El comercio de la plaza de Catalunya tendrá una superficie de 5.000 metros cuadrados distribuidos en seis plantas, con un amplio espacio de alimentación y un área de artículos para el hogar, además de secciones de moda, lencería, cosméticos y complementos. En la última planta se instalará un coffee shop siguiendo el tradicional modelo inglés, pero adaptado a los gustos y costumbres gastronómicas de Cataluña.

Fuentes de la firma expresaron su confianza en el éxito del nuevo establecimiento y señalaron que esperan unos 50.000 visitantes semanales. Estas previsiones se sustentan en la aceptación que ha tenido hasta ahora el centro situado en L"Illa Diagonal y en el hecho de que el nuevo Marks & Spencer está en el centro de la ciudad.

"La capacidad de atracción del centro de Barcelona está más que demostrada, no sólo por la red de comercios de moda, sino también por el éxito que ha tenido el Triangle", manifestó ayer uno de los portavoces de la empresa.

La fachada de lo que fue la oficina principal del Banco Central en Barcelona ha estado cubierta por unas grandes lonas durante unos dos años, mientras se trabajaba en el interior.

Las especiales características del edificio han hecho imposible construir un aparcamiento en el subsuelo. Por eso la firma ha llegado a un acuerdo con la empresa Saba, de modo que las dos primeras horas de estacionamiento serán gratuitas para los compradores.

Los responsables de la cadena consideran que el nuevo establecimiento puede contribuir a enriquecer la oferta de la zona, que en los últimos años ha sufrido una profunda transformación a partir de la conversión del Portal de l"Àngel en zona peatonal. Esa medida impulsó el comercio ya instalado y constituyó un reclamo para nuevas tiendas, sobre todo de confección. La apertura del Triangle fue el segundo elemento dinamizador, que además acabó con la deteriorada imagen de la esquina de Pelai con la plaza de Catalunya. Esta esquina llegó a ser conocida como la manzana de la vergüenza.

Los responsables de Marks & Spencer afirman que el centro no supondrá una competencia directa para el pequeño comercio ni para El Corte Inglés porque sus establecimientos no son grandes almacenes, sino que venden exclusivamente productos de su marca.