La UE intenta que Arafat y Peres se reúnan para atajar la ola de violencia

La diplomacia internacional, encabezada por la Unión Europea, ha lanzado una ofensiva general para salvar la cumbre entre el presidente palestino Yasir Arafat y el ministro de Asuntos Exteriores israelí Simón Peres. La reunión, pactada hace siete días, después de un viaje de Javier Solana a la región, empezó a tambalearse el pasado domingo tras tres atentados palestinos, que se cobraron siete víctimas, y la sangrienta réplica de las tropas israelíes, que bombardearon objetivos militares y civiles en cuatro ciudades autónomas.

Israelies y palestinos se encuentran en un callejón sin salida. Nadie sabe si en las próximas horas se va a celebrar la cumbre entre Arafat y Peres, pactada hace una semana. Las declaraciones del jefe de la diplomacia española Josep Piqué asegurando que la reunión se iba a celebrar hoy martes en algún lugar de Israel, según le había confesado el propio Simón Peres, fueron desmentidas desde Gaza por el propio Arafat.

En cuanto a Israel, las reticencias con respecto a la cumbre están capitaneadas por sectores del Ejército y del Gobierno que propugnan suspender de forma total y absoluta el encuentro, como represalia a las últimas acciones de los activistas palestinos. Los responsables israelíes esbozaron el no ayer, después de que Arafat les propusiera celebrar la cita el mismo lunes en la ciudad egipcia de Taba. Portavoces del gobierno de Sharon dijeron que era 'una propuesta precipitada' efectuada para evitar las represalias contra los palestinos.

Las mismas fuentes insistían ayer en descartar Taba como lugar del encuentro, recalcando que no era el sitio más indicado, ya que 'podría dar la sensación que se trataba de la continuación de las negociaciones entabladas en ese lugar por el anterior Gobierno laborista'. Un portavoz del Gobierno israelí se encargaría horas más tarde de disfrazar esta negativa, insinuando la posibilidad de que simplemente fuera aplazada y que pudiera acabar celebrándose en cualquier punto de Israel 'en los próximos días'.

El diplomatico español Miguel Angel Moratinos y el jefe de la diplomacia europea, Javier Solana, se mostraban cautos con respecto a la celebración de la cita. Se negaban a interpretar el no de Israel como definitivo y aseguraban al unísono que 'por el momento no hay una decisión final' .

La cumbre entre el presidente Arafat y Peres tratará por enésima ocasión encontrar una salida negociada a la crisis palestino-israelí y poner punto final a una Intifada que el próximo 28 de septiembre cumplirá un año. Los últimos acuerdos, pactados según el informe elaborado por la comisión internacional Mitchell, duraron poco menos de 48 horas.