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Cuevas pide frenar los aumentos salariales y más flexibilidad laboral

La CEOE fija la pérdida de competitividad como el principal problema

La patronal CEOE cree que el principal desequilibrio de la economía española es la pérdida de competitividad exterior. Para corregirlo, su presidente, José María Cuevas, propone "más flexibilidad en las relaciones laborales", rebajar los costes fiscales y las cotizaciones de las empresas y actuar en la negociación colectiva de 2005, con medidas como contener los aumentos salariales, elevar la productividad o incrementar la jornada laboral.

Cuevas marcó ayer en la Asamblea anual de la confederación empresarial esos objetivos que CEOE va a defender en los próximos meses en su diálogo con el Gobierno -define sus relaciones como "cordiales y fluidas"- y con los sindicatos.

A éstos les pide que contribuyan a poner en marcha "fórmulas flexibles de contratación" y que tomen nota de la capacidad de reacción de las empresas y sindicatos alemanes, en clara alusión a los pactos que han firmado de congelación salarial y de aumento de la jornada laboral.

El presidente de la patronal mostró asimismo dos preocupaciones. Unas relaciones internacionales marcadas por los problemas de entendimiento con Estados Unidos, ante los que reclama "una política compatible con la defensa de nuestros intereses económicos". La segunda se refiere a la reforma de la Constitución, ante la que pide el máximo consenso posible y que no se caiga en la contradicción de "defender un mercado único europeo y fragmentar el mercado en nuestro país".

El informe presentado previamente por el presidente de la comisión de economía de CEOE, José Luis Feito, estaba plagado de pesimismo. Aseguró que "España es el segundo país después de Portugal en pérdida de competitividad desde la incorporación al euro", y añadió: "Si no corregimos ese desequilibrio podremos llegar a un crecimiento cero de la economía". Un escenario que Cuevas no contempla.

Feito criticó también muy duramente el proyecto de Presupuestos Generales para 2005 elaborado por el Gobierno socialista, que calificó de "muy expansivos", por el "aumento excesivo del gasto en educación, en remuneración para los funcionarios y en pensiones mínimas". En su criterio, "se ha desaprovechado una oportunidad para corregir los desequilibrios, incluso los agudiza".

Junto a los problemas de competitividad exterior, la CEOE coloca el coste que las empresas deben afrontar para cumplir los compromisos del protocolo de Kioto en reducción de emisiones contaminantes. Su responsable de medio ambiente, Juan José Nava, emplazó al Gobierno a precisar esos compromisos.

Fuga de empresas

Otro frente de actuación es el proceso de fuga de empresas que, según el secretario general de la patronal, Juan Jiménez Aguilar, puede afectar en breve a la economía española, debido a que existen "marcos laborales rígidos, unidos a elevados costes". La fórmula que propone para remediarlo es actuar sobre los costes laborales no salariales y en la adaptación de unas relaciones laborales más flexibles.

El dirigente empresarial citó las recomendaciones de la OCDE y de otros organismos internacionales para que se reduzcan las cotizaciones sociales. A su juicio, hay un margen amplio por el excedente actual de la Seguridad Social de 5.000 millones de euros, más los de ejercicios anteriores con los que el Fondo de Reserva de las pensiones tendrá en 2005 una dotación de 24.000 millones de euros, cuando estaba previsto un límite de 6.000 millones. También citó el excedente del Fondo de Garantía Salarial (Fogasa), cifrado en 308 millones para este año, y los 5.000 millones del desempleo. Jiménez Aguilar se preguntó: "¿Es buena la política de cargar la recaudación sobre la mano de obra?". Su respuesta es: no.

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