La legislatura del ladrillo

El presidente murciano, Ramón Luis Valcárcel (PP), afronta unas nuevas elecciones autonómicas con la tranquilidad que le dan todas las encuestas, que apuntan a que los murcianos, lejos de pasarle factura por los 12 años que lleva al frente del Gobierno regional y por los casos de corrupción destapados por la fiscalía relacionados con el ladrillo, aumentan su apoyo. Ese mismo ladrillo ha sido el gran activo de Murcia en los últimos años.

ECONOMÍA Crecimiento de hormigón

"La economía de la Región de Murcia va muy bien", asegura el presidente de los empresarios murcianos, Miguel del Toro. Los datos parecen darle la razón: el número de personas que cotizan a la Seguridad Social ha pasado de 300.000 a 620.000 desde la entrada del PP en el poder (1995), al mismo tiempo que, según Del Toro, "desde 2000 se han creado 335.000 puestos de trabajo fijos". Ahora mismo la Región supera el millón trescientos mil habitantes, con una previsión para el año 2020 de dos millones. Las cifras de paro son también muy bajas, del 7%, lo que prácticamente supone paro técnico. Frente a esta realidad, los representantes sindicales aseguran que el crecimiento puede tener los pies de barro, ya que está basado en un sector, el de la construcción, que emplea de forma directa a más de 100.000 personas, muchos de ellos extranjeros. "La temporalidad y la precariedad es el signo de nuestra economía y parece que lo asumimos con naturalidad", se lamenta el secretario regional de CC OO, José Luis Romero, quien asegura que de cada 100 contratos que se formalizan unos 42 son temporales. En similares términos se expresa el máximo dirigente regional de UGT en la Región de Murcia, Antonio López Baños, quien apunta, además, que la productividad de los trabajadores es de las más bajas de España.

URBANISMO Y VIVIENDA Italia se queda pequeña

Ante un hecho objetivo, el que los 45 municipios de la Región de Murcia han reclasificado en esta legislatura suelo en el que se podrían construir hasta 800.000 viviendas, según reconoció el presidente de los promotores, José López Rejas, en la Comunidad hay dos visiones antagónicas del fenómeno. El decano del Colegio de Arquitectos de la Región de Murcia, Francisco Camino, asegura que hay que cambiar el modelo urbanístico por uno que prime la calidad y no la cantidad. Tan sólo en 2006, el Colegio, que apuesta por un desarrollo más sostenible y que llegue a todos, ha visado más de 100.000 viviendas (unas 1.000 de protección oficial), la mitad de las casas iniciadas en Italia en el mismo año. "Hay que racionalizar el urbanismo de los municipios de la Región de Murcia y poner un poco de orden, tratando de buscar que el presupuesto de los ayuntamientos no se nutra sólo de los convenios urbanísticos", apunta el rector de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT), Félix Faura, quien considera que la industria debería tener un mayor protagonismo. Por su parte, José Antonio Cobacho, de la Universidad de Murcia (UMU), da un tirón de orejas a los candidatos: "No están centrándose en solucionar el problema del acceso a la vivienda, que es muy importante", apunta el rector de la UMU.

AGUA Y MEDIO AMBIENTE Más agua del Tajo, desalinizadoras aparte

"Es un disparate continuar con la política del enfrentamiento de Valcárcel, cuyo Gobierno ha criticado la construcción de desalinizadoras, mientras que ellos mismos promueven la planta de Escombreras", asegura el secretario general de UGT. Con un esfuerzo inversor sin precedentes, la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, ha iniciado la construcción de cinco plantas desalinizadoras, la más importante de ellas en Torrevieja (Alicante) para los regantes del trasvase Tajo-Segura, que la Generalitat valenciana ha paralizado. "Estamos hartos de oír que los murcianos utilizamos mal el agua, y esta mala imagen es culpa de los medios de comunicación nacionales", se lamenta Del Toro, quien sostiene que más del 60% del regadío murciano tiene instalado el riego por goteo, es la comunidad en la que más se depura el agua y también es la región peninsular en la que se paga el agua más cara. "Nos duele lo que nos ha hecho el Gobierno de Zapatero, que nos ha quitado el agua del Ebro, que se tira al mar, y eso ha tenido efectos sobre el Tajo-Segura, que está siendo cuestionado en Castilla-La Mancha", relata Del Toro. La defensa del Tajo-Segura es otro de los puntos en los que todos los murcianos, excepto los políticos del PP y del PSOE, se ponen de acuerdo. En unos pocos días se han recogido más de 30.000 firmas en contra del Estatuto de Castilla-La Mancha, que plantea la caducidad del trasvase en 2015.