El programa de movilidad Erasmus continuará el curso que viene

La Comisión Europea, que tiene Erasmus+ como uno de los ejes de cohesión entre los países miembros, ha acordado que este programa de movilidad continuará el curso que viene. Miles de estudiantes españoles ―viajan unos 65.000 cada curso― aguardaban desde hace semanas para saber si podrían disfrutar finalmente su estancia en el extranjero. Pero, ante la incertidumbre provocada por la pandemia del coronavirus, la Comisión Europea pretende adecuar la beca a una situación que puede cambiar en cualquier momento por un rebrote de covid-19. El Ministerio de Universidades español anunció este lunes su continuación en una nota de prensa.

Bruselas va a dar la posibilidad de comenzar el programa a través de actividades virtuales y luego seguir en el extranjero, si la situación así lo permite. “Aunque la movilidad sigue siendo el núcleo del programa Erasmus+, las circunstancias excepcionales creadas por la pandemia y las restricciones a la movilidad física puede que continúen afectando a las movilidades, al menos durante los primeros meses del próximo curso”, reconoce Coral Martínez, directora del Servicio Español para la Internacionalización de la Educación (SEPIE). “A los estudiantes se les podría ofrecer la posibilidad de comenzar su participación en el programa Erasmus+ a través de actividades virtuales, para combinarse con una movilidad física en el extranjero en una fecha posterior si la situación así lo permite”. Durante el período virtual el alumno no recibiría la cuantía económica de la beca, pero sí respaldo organizativo.

Los proyectos que terminaban este octubre ―porque empezaron en 2018 o 2019― se van a prolongar por fuerza mayor 12 meses, de forma que los alumnos puedan comenzar su estancia más tarde si es necesario por un rebrote. España es el país que más erasmus recibe del mundo y de los que más envía a otros países (no solo universitarios, sino también de FP). El programa tiene ya 33 años de vida, han disfrutado de él 10 millones de europeos, de los que casi un millón son españoles.

Cuando Italia comenzó a confinar el norte del país a finales de febrero, la Comisión se comprometió a repatriar de forma gratuita a los estudiantes. “Si se puede acreditar una rescisión de contrato por fuerza mayor, se abona la vuelta”, explicó entonces el ministerio. Las universidades han buscado, además, la fórmula para que los universitarios no perdiesen el curso, bien siguiendo las clases online del campus receptor o en el de origen.

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