Una nueva incursión militar israelí en Gaza se salda con un muerto y 20 heridos

Un palestino ha muerto y 20 han resultado heridos esta madrugada tras una incursión del Ejército israelí en el campo de refugiados de Jan Yunes, situado en la franja de Gaza, según han informado los servicios de seguridad palestinos. Durante el transcurso de la operación, realizada por tanques y carros blindados israelíes, varios casas del campo de refugiados habrían sido destruidas, según añadieron las mismas fuentes.

Israel ha lanzado esta operación en represalia por el lanzamiento de cinco obuses de mortero contra varios objetivos judíos en la franja de Gaza, que no causaron víctimas ni daños materiales.

Tres de los proyectiles cayeron en el enclave de asentamientos de Gush Katif y otros dos en las cercanías del paso fronterizo de Erez, según fuentes militares israelíes.

"Decenas de tanques, vehículos blindados para el transporte de personal y excavadoras han avanzado esta noche hacia el campo de refugiados desde los asentamientos de Nevé Dekalim y Netzer Hazani", ha señalado un portavoz de la Seguridad Pública palestina.

El portavoz ha añadido que "la incursión en los territorios bajo control de la ANP es una nueva violación por parte de Israel del alto el fuego acordado entre las partes".

Por su parte, un portavoz militar israelí ha confirmado la operación del ejército en el campo de Jan Yunes "tras la multiplicación de los lanzamientos de obuses de mortero, de granadas anti-tanques y de tiros que tenían como objetivo la colonia de Newe Dekalim y de las posiciones del Ejército israelí en la región".

Artillería contra zonas pobladas

Las excavadoras han demolido las barreras de tierra que protegían las entradas por el norte y el oeste, y han penetrado en el campo de refugiados, bajo control de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), para demoler varios edificios.

Varios testigos han explicado que los tanques han disparado al menos 30 proyectiles de artillería contra zonas pobladas, en las que cientos de milicianos armados se habían concentrado para impedir el avance israelí.

Asimismo, las mezquitas llamaban a la población a resistir el ataque israelí y a salir a la calle a defender el campo de refugiados, de donde cientos de personas -muchas con niños en sus brazos- huían esta noche con dirección a otras zonas de Gaza.

Al caer la noche se registró un recrudecimiento de la violencia en todos los distritos palestinos de Cisjordania, con intercambios de fuego en zonas que estaban en una calma absoluta desde hacía más de un mes.

Por otra parte, unidades de paracaidistas y de blindados sitiaron la localidad de Shawareh, situada al este de Belén, en Cisjordania, y procedieron a la detención un número indeterminado de ciudadanos palestinos acusados de "ataques contra civiles y soldados israelíes", aseguró el portavoz militar, que añadió que, una vez realizada la operación, las unidades involucradas se retiraron del lugar.

La radio publica israelí precisó que los ocho detenidos son miembros de los movimientos Hamás, de la Yihad Islámica y de las milicias Tanzim, brazo armado de Al Fatá, la organización del presidente de la Autoridad Palestina, Yaasir Arafat.