España se sitúa fuera de la zona de riesgo extremo por coronavirus

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Las medidas que han tomado las autoridades sanitarias han sacado a España del riesgo extremo por la pandemia del coronavirus. Sanidad aprobó un semáforo para catalogar el peligro de cada territorio el pasado 22 de octubre. Solo cinco días después, el país (como promedio) ya se situaba en el nivel más elevado (extremo). Este jueves ha marcado una incidencia de 240 por 100.000 habitantes en los últimos 14 días, lo que sitúa esta estadística por debajo de este nivel, pero todavía en riesgo alto.

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Actualización de la pandemia con Fernando Simón

Realmente, el riesgo no se mide solo por una variable. Para calcularlo, Sanidad establece dos bloques de parámetros. El primero trata de medir el nivel de transmisión del virus a través de seis estadísticas: la incidencia acumulada por 100.000 habitantes en 7 y en 14 días; ambas medidas, pero referidas a la población mayor de 65 años; el porcentaje de positividad de las pruebas diagnósticas y el porcentaje de casos con trazabilidad. En el segundo bloque se mide la capacidad asistencial a través de la ocupación de camas en planta y en UCI.

A cada una de estas métricas se le asigna un valor. Por ejemplo, el umbral de riesgo extremo está por encima de 250 casos a 14 días; 125 a una semana (cifras que bajan a 150 y 75 en caso de los mayores de 65 años); más de un 15% de positividad en las pruebas y menos de un 10% de trazabilidad, es decir que solo se conozca el contacto de 10 de cada 100 positivos, o menos. En el bloque de la asistencia, el máximo riesgo se alcanza en cuanto se supera el 20% de camas ocupadas por enfermos de covid en planta y el 25% en cuidados intensivos. Cuando un territorio tiene dos o más indicadores del primer bloque por encima de estos niveles y al menos uno del segundo, se considera que está en riesgo extremo.

El único indicador que quedaba en riesgo extremo entre los que miden la incidencia de la epidemia (de los que son públicos) eran los casos a 14 días, que este jueves ha bajado por primera vez de 250 desde que superase este umbral el 14 de septiembre. Aunque por entonces no existía semáforo, todavía no habría llegado al nivel más alto de peligro: las estadísticas en los hospitales todavía no habían alcanzado el umbral necesario.

El semáforo, en cualquier caso, está diseñado para medir el riesgo de localidades. Aplicarlo a territorios más grandes, o a todo el país, sirve para comprobar el promedio y la tendencia. Sanidad no publica datos detallados por municipios. Si se va hasta el nivel de las comunidades autónomas, con los últimos publicados, todavía quedan cinco en riesgo extremo: Aragón, Asturias, Cantabria, País Vasco y La Rioja. 10 están en riesgo alto: Andalucía, Baleares, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, Comunidad Valenciana, Extremadura, Madrid, Murcia y Navarra. Galicia y Canarias marcan riesgo bajo.

La tendencia a la baja puede cambiar en cualquier momento. Este jueves se sumaron a las estadísticas 10.127 positivos y 254 fallecidos. Como señala el epidemiólogo Antoni Trilla, la situación epidemiológica es “inestable”. Los especialistas temen que el puente que comienza este viernes pueda producir un repunte, tal y como sucedió con el del 12 de octubre, si bien ahora existen muchas más limitaciones a la movilidad que entonces.

En ello ha insistido Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, en su comparecencia del jueves “En estos días festivos podemos tirar por tierra esfuerzo de casi dos meses”. Se ha mostrado muy escéptico sobre la posibilidad de llegar a Navidades con una incidencia de 25 casos por 100.000 habitantes, la meta que se ha marcado el Gobierno para tener la epidemia controlada. “Esto nos indica que tenemos que seguir manteniendo la tensión”. Pero ha señalado que el puente será determinante para llegar a las Pascuas en mejores o peores condiciones. En este sentido, ha explicado que el plan navideño aprobado el miércoles está pensado para unas cifras similares a las actuales y que si cambiaran radicalmente, para bien o para mal, se podría revisar.

Simón ha advertido de que aunque la tendencia es buena, la presión asistencial sigue muy alta y que una subida en los casos podría sobrecargar al sistema. Con el semáforo del ministerio, la ocupación de las UCI por pacientes de coronavirus es el único que permanece en riesgo extremo. Ocho comunidades se sitúan en el nivel de peligro más alto: Aragón, Asturias, Cantabria, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, Comunidad Valenciana, Madrid, País Vasco y La Rioja. Esto quiere decir que en sus camas de cuidados intensivos más del 25% de los pacientes son de covid-19. En el otro extremo está Galicia (7,2%), gracias a lo cual se mantiene en riesgo bajo, pese a tener una incidencia (213) superior a otras comunidades.

El mejor de los indicadores del semáforo es el nivel de positividad: el porcentaje de personas a las que se le hacen test que da positivo, un 8,6%. El nivel que la Organización Mundial de la Salud considera aceptable para considerar que la epidiemia está controlada es de menos del 5%.

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